Diario de León

León cambiará los semáforos de foto rojo al bajar las multas: sancionarán en Ramón y Cajal y Alcalde Miguel Castaño

Los nuevos se ubicarán en Ramón y Cajal y Alcalde Miguel Castaño

Gráfico con los radares y foto rojo de la ciudad

Gráfico con los radares y foto rojo de la ciudad

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El escenario de los semáforos de foto rojo cambiará en los primeros meses de 2020. Después de más de un año y medio desde la última modificación de ubicaciones, que no se alteraron en verano por la coincidencia con las elecciones a pesar de que el contrato permite hacerlo una vez cada doce meses, el Ayuntamiento trasladará los equipos de sanción toda vez de que las multas registradas han bajado. Aunque todavía se encuentra en estudio, la propuesta de la Policía Local pasa por habilitar dos nuevas señalizaciones: en los dispositivos de Ramón y Cajal, en el entronque con la plaza de Santo Domingo, y en la avenida Alcalde Miguel Castaño, antes del cruce con López de Fenar, que controlaría a los vehículos que circulan en sentido hacia el parque de San Francisco.

La modificación no implicará que haya más semáforos que multan, pero sí que estén en funcionamiento los cuatro que entran en el contrato. Ahora, tan sólo sancionan los que hay en Santo Nonia, a la altura del cruce con Arquitecto Torbado; en Padre Isla antes del desvío hacia Ramiro Valbuena; y en el Paseo de Salamanca, justo en la intersección con la avenida de Palencia. El cuarto, situado en el cruce de Michaisa, al lado de la nueva gasolinera de Leclerc, continúa colocado en la carcasa, pero no sanciona desde el 26 de diciembre de 2018, después de las quejas acumuladas por la indefinición que suponía que buena parte del tiempo estuviera en ámbar. A mayores hay otros tres soportes anteriores, pero que se apagaron ya en el verano de 2018:en Mariano Andrés, junto a la iglesia de Las Ventas; en Santa Ana, al lado de la fuente, en sentido La Puentecilla; y en Doctor Fleming, poco más allá de la intersección con la prolongación de Ordoño II.

El único que no se plantea quitar es el de paseo de Salamanca, que fue el último en entrar en funcionamiento. Por contra, sí que desaparecerá al menos uno de los otros dos, en Santa Nonia y Padre Isla, e incluso ambos si al final hay otras propuestas por parte de la Policía Local, que se basa en los puntos en los que hay contabilizados más incidentes, y que colocó el primero de estos equipos en junio de 2009, al final de la avenida Europa, cuando el ahora alcalde era el concejal responsable.

No habrá cambios en el radar. Seguirá con las sanciones antes del cruce de Oteruelo, a pesar de que hay carcasas en las avenidas Real del Ejido y Universidad.

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