El Mercado del Conde urge a licitar los puestos vacíos para revitalizarlo

Con casi un siglo a sus espaldas —abrió sus puertas en 1929— el Mercado del Conde Luna reclama una atención que no tiene para salir de la atrofia en que se encuentra desde hace años. Una situación de abandono que le ha llevado a ser una sombra de lo que fue y que amenaza seriamente su futuro, según denunció ayer el presidente de la Asociación de Comerciantes del Mercado del Conde, Carlos Escanciano, al poner encima de la mesa un dato demoledor: el recinto tiene únicamente trece puestos abiertos y 23 están cerrados, algunos desde hace años. Números que se traducen en que funciona a un 36% de su capacidad.

«Estamos en una gran precariedad, pero tampoco es nuevo porque llevamos años así. El Ayuntamiento sigue sin cumplir las promesas que nos hicieron y sin sacar los puestos a licitación, algo que consideramos fundamental para reactivar el mercado y darle mayor actividad», subrayó.

Escanciano puso un ejemplo cercano que ilustra el sinsentido que afecta a estas instalaciones. «Hace un año iba a cerrar una frutería y se presentó una pareja interesada en coger el traspaso pero en el Ayuntamiento les dijeron que la persona que tenía ese puesto no podía resolver el traspaso y ese puesto se quedó vacío. Es una pena que haya gente joven con ganas y con ilusión y que al final solamente le pongan trabas», dijo en tono de queja.

Situaciones como esta terminan siempre con un guión parecido: los interesados en el Mercado del Conde cambián el punto de mira y buscan una oportunidad de negocio fuera de allí. «Hace algún ti empo llegamos a tener noticia de hasta ocho solicitudes para coger negocios que finalmente no salieron adelante». Con un alquiler medio de unos 400 euros por puesto, los precios animan al relevo pero las trabas no.

En su día el equipo de gobierno municipal del PP anunció un plan de reforma de unos dos millones de pesetas que nunca se activó. El actual equipo de gobierno maneja también un proyecto de remodelación menos ambicioso económicamente que tampoco se sabe cuando verá la luz. El presidente de la Asociación de Comerciantes se queja de que siempre se les pone en el horizonte ese plan de mejora que nunca pasa del plano de buenas intenciones y que en último extremo impide acciones concretas para insuflar nuevos bríos al mercado. «No es incompatible avanzar en un proyecto de mejora con la licitación de los puestos de vacíos».

En septiembre del año pasado el actual equipo de gobierno anunció la pronta licitación de los puestos vacantes pero es un compromiso que sigue pendiente. Escanciano reconoce que no tiene una explicación para el abandono del viejo Mercado de Abastos leonés. «No sabemos cual es la razón de que esté así, pero al final es algo que nos mina y nos desmotiva a todos, a los comerciantes y también a los clientes que cada vez ven menos puestos abiertos. De hecho, hay un pasillo que son todo trapas bajadas».

Solventar los problemas para el acceso de vehículos al recinto es otra de las reivindicaciones de la Asociación de Comerciantes que sigue pendiente.