El accidente de la Vasco fue «imprevisible en su magnitud y en sus consecuencias»

El accidente que el pasado 28 de octubre costó la vida a seis mineros y causó heridas a otros cinco en el macizo 7 del Pozo Emilio del Valle de la Hullera Vasco Leonesa «debe considerarse imprevisible en su magnitud y consecuencias», según recoge el informe elaborado por la empresa, que ha sido comunicado a la Comisión de Seguridad y que se ultima para entregarlo a la Dirección General de Energía y Minas.

Según explica la empresa, las primeras conclusiones revelan que «la causa más probable» del siniestro fue la «emisión súbita de metano ocurrida en el postaller de la explotación Macizo 7, siendo el alcalde de la emisión imprevisible en su magnitud y consecuencias».

Además, el informe recoge que en el taller de la explotación se cumplían las condiciones de seguridad «recogidas en la normativa vigente de aplicación»; y que la Hullera dispone de «procedimientos y ha implantado actuaciones con el objetivo de cumplimentar cada una de las prescripciones detalladas» en el real decreo de disposiciones para proteger la seguridad y la salud de los trabajadores en las actividades mineras. De igual manera, cumple el resto de los reglamentos vigentes sobre normativa de seguridad minera.

Las conclusiones adelantadas del informe explican que «en el análisis documental y en las verificaciones in situ realizadas por el prestigioso Laboratorio Oficial de Madariaga no se ha detectado la existencia de prescripciones reglamentarias que no hayan sido objeto de la correspondiente actuación, dando cumplimiento a las mismas».

Vigilados y experimentados

Las investigaciones llevadas a cabo por los técnicos de la empresa, que se acompañarán al resto de los informes para esclarecer las causas del accidente, señalan que los puestos de trabajo se «encontraban en vigilancia permanente realizada por el vigilante de explotación»; y que los trabajadores implicados en el siniestro «disponían de la capacitación y experiencia necesaria para realizar las tareas asignadas».

Además, el informe insiste en que todo el personal llevaba consigo en autorrescatador durante todo el tiempo de permanencia en la explotación.

Concluye que «a pesar de las medidas de seguridad, procedimientos adoptados y la formación y capacitación del personal, el suceso debe considerarse imprevisible en su magnitud y consecuencias».

Los seis mineros fallecieron de manera inmediata, y quienes acudieron a rescatarles sufrieron también daños por el escape de metano.