Los mineros conquistan el celuloide

Los mineros conquistaron Sol en 2012. Fue el fin de una batalla, épica y dolorosa, que perdura en la memoria de las cuencas y que ahora recobra vida en Re-Mine. El último movimiento obrero, la película documental de Marcos M. Merino, que llega hoy al ELCINE de Villablino con la presencia del director en la sesión de apertura a las 19.30 horas.

Se presenta en el corazón de Laciana, una de las comarcas más castigadas por la reconversión del carbón, después de un largo recorrido internacional, desde Argentina a Rusia, y laureada por tres premios —en Sevilla, México y Santiago de Compostela— y una mención especial del Jurado en el Bafici de Buenos Aires. Fabero, el día de Santa Bárbara, fue la primera localidad de la provincia que se asomó a la historia de aquellos 73 días de movilizaciones y del personaje colectivo que forman mineros, cortes de carretera, cargas policiales, encierros en los pozos y carreras por el monte, marcha negra y mujeres del carbón.

«Los mineros han sido recibidos con admiración porque son conocidos y es una historia universal, en todas partes encuentran puntos en común», apunta Marcos Merino sobre el impacto del documental en los 13 festivales por los que ha pasado desde su estreno en abril en Buenos Aires.

«Se entiende perfectamente en cualquier lugar del mundo y empatizan con ella porque es la historia de los trabajadores», añade. En San Petesburgo tarareaban Santa Bárbara bendita y en México los obreros del sector eléctrico se emocionaban viendo a los mineros leoneses y asturianos en su épica batalla.

Su presentación en las cuencas tiene matices particulares. «El ambiente que he sentido en Asturias y en León está más alejado de la épica y más próximo al dolor», confiesa el director. «Los mineros son conscientes de que su lucha no dio los resultados buscados y no se ha parado la destrucción de puestos de trabajo», añade. Y duele ver «cómo está el norte y cómo están las cuencas mineras».

Marcos Merino explica que el subtítulo elegido para el documental —El último movimiento obrero— se refiere a las luchas obreras de la revolución industrial que «construyeron el estado del bienestar que hoy se está derrumbando en Europa».

No cree que sea la última lucha de los trabajadores. «Estamos viviendo un momento de crisis muy difícil, pero está claro que juntos podemos», aclara. Esa es la esperanza. El relato de Re-Mine, un título con ecos de resistencia minera y de memoria perdurable y viva, intenta alejarse de los estereotipos y a lo largo de 101 minutos sumerge al espectador en el universo de la lucha minera. La película no tiene un trazo marcado porque pretende que la gente la conozca y la juzgue por su misma. Por ello, hace un ejercicio de contención narrativa, sin voz en off ni entrevistas. «La gente se muestra agradecida porque ven que es un legado para el futuro», apunta el periodista.

Lugar: ELCINE. Villablino

Hora: 19.30 y 22.30.

Fecha: Desde hoy al 15 de diciembre.