Diario de León

Luis Carrasco Llamas | Virólogo exinvestigador en el centro de biología molecular Severo Ochoa

«Tras el éxito de la vacuna anticovid, el reto es conseguir antivirales eficaces»

El científico leonés Luis Carrasco Llamas se jubiló en marzo y desde entonces ha escrito tres nuevos libros. DL

El científico leonés Luis Carrasco Llamas se jubiló en marzo y desde entonces ha escrito tres nuevos libros. DL

León

Creado:

Actualizado:

El virólogo leonés Luis Carrasco Llamas pone el broche a más de 40 años de una exitosa y larfa trayectoria en el laboratorio, dedicado al estudio de los virus humanos. La pandemia aceleró su jubilación y durante el último año se ha dedicado a escribir. Acaba de publicar en Amazon Luis Carrasco. Autobiografía y publicaciones científicas ’, Enfermedades neurodegenerativas y microbiota humana y Antivirales contra la covid-19. Prevención y tratamiento. Fue uno los científicos españoles de éxito en los años 80. Los jóvenes investigadores querían trabajar en su laboratorio y a sus puertas llamó Katlin Karicó, la bioquímica húngara precursora de la vacuna anticovid de ARN mensajero. Carrasco, que salió de León con 17 años con una beca para estudiar Biología en Madrid, llegó a ser catedrático de Microbiología de la Universidad Autónoma de Madrid e investigador del Centro de Biología Molecular Severo Ochoa. A mediados de los años 90 su vida se paró en seco al sufrir una retinopatía que le dejó sin vista y con muchos problemas de salud. Respondió a la adversidad con una novedosa línea que inició en el año 2000 con el estudio de hongos y su influencia en las enfermedades neurodegenerativas y encontró una cura para convivir con la enfermedad. Aún tiene esperanza de recuperar la visión.

—¿Qué relación tienen los hongos con las enfermedades neurodegenerativas?

—Empecé a estudiar su etiología porque pienso que estas enfermedades son producidas por infecciones de hongos y otras bacterias. Todo empezó a raíz de la retinopatía que sufrí. Descubrí que se trataba de una infección de hongos y salvé la vida. Me di cuenta de que había otras enfermedades en las que podían estar implicados los hongos. Empezamos a investigar en los cerebros de las personas fallecidas y lo encontramos. Fue un éxito.

—Su libro sobre el coronavirus covid-19. ¿Qué afecta a esta pandemia?

—He recopilado información científica para ofrecer una idea sobre lo que son virus, coronavirus, enfermedad pandémica, vacunas, productos naturales y prevención con un afán divulgativo. No son investigaciones mías directamente. Cerré mi laboratorio justo cuando empezó la pandemia, me jubilé y me dedico a escribir.

—¿Cómo valora la gestión de la pandemia en España?

—Hemos sido los peores países en el mundo en cuanto a la parte sanitaria y tenemos la tasa de mortalidad por habitantes más alta del planeta. La mala gestión ha repercutido enormemente en la economía. Y todo porque el Gobierno se ha negado a hacer cosas como tener un comité de expertos ( The Lancet ha dicho varias veces que España debería asesorarse) y además engañaron a la gente diciendo que lo tenían. Fauchi, en Estados Unidos, Italia, Francia, Alemania... todos los países de nuestro entorno tienen comité de expertos.

—¿Qué ha faltado en la gestión del Gobierno?

—Primero no tener una comisión de expertos, negar la eficacia de las mascarillas o permitir la manifestación del 8M y los partidos de fútbol. Eliminaron el Mobile de Barcelona y dejaron lo demás. Si en ese momento hubieran dicho que se cerraban todas las cosas, hubiera habido el 10% de muertos. Y ahora no reconocen ni las cifras. Hay que tener transparencia.

La solución definitiva
«Una pastilla para reducir los síntomas bajaría la presión sanitaria y mejoraría la economía»

—¿Le ha dolido tener que retirarse por la pandemia?

—La pandemia determinó lo que ya estaba cerca. Di por concluida mi carrera en la universidad. Cerré y volví a casa tranquilamente. Me quedé tranquilo durante un tiempo y luego me decidí por recopilar mi vida y hacer estas publicaciones que acaban de salir en Amazon.

—¿Cómo ha marcado su vida la retinopatía que sufrió?

—Ingresé en la Once en 1996 y aún tengo la esperanza de revertir la ceguera. Con el tratamiento que encontré he mejorado muchísimo porque era una infección sistémica. Ahora estoy estupendamente. Tengo la cabeza bien y puedo hablar. Me queda lo último que es quitar la infección de la retina.

—Es decir que la retinopatía le afectaba a todo el organismo además de dañar su retina ¿Cómo logró esa mejoría?

—La mejoría ha venido con el uso de antifúngicos y productos naturales. Pero la infección en la retina no es fácil de erradicar, aunque en el año 1999 cuando descubrí el tratamiento pensé que sí lo sería.

—¿Qué se puede aplicar de sus investigaciones a la lucha contra el covid-19?

—Durante tiempo estuve estudiando agentes antivirales para distintos virus —el antibiótico doxiciclina, polisacáridos sulfatados y flavonoides que son componentes naturales de plantas con acción antiviral y no son tóxicos—. No lo estudié con el coronavirus pero he visto que la doxiciclina actúa muy bien frente al SARS-Cov-2 . En un estudio con cuatro pacientes con infección severa les funcionó muy bien. Ha habido éxito en el desarrollo de vacunas, no tanto en el desarrollo de agentes antivirales. Es el reto. A ver si este año, para las personas no vacunadas o a las que no les funcionen las vacunas, se consiguen antivirales para que no tengan que ser hospitalizadas o evitar la muerte. Con un agente así la economía iría para arriba y se evitaría la presión hospitalaria. Ni el remdesivir ni la hidroxicloroquina han dado el resultado esperado. Ha sido más el daño que el beneficio.

Título destacado
«La mala gestión sanitaria de la pandemia ha repercutido enormemente en la economía»

—Hay también expectativas con el desarrollo de anticuerpos monoclonales. ¿Cómo ve esta línea contra el covid?

—En Inglaterra ya se está trabajando con algunos anticuerpos monoclonales que funcionan. A Trump le trataron con un cóctel de anticuerpos monoclonales y van muy bien porque modulan el sistema inmune. Pero hay que ponerlos en vena. Sería ideal tomarse una pastilla cuando llegan los síntomas del covid y reducirlos. Hay muchas compañías investigando en todo el mundo. En España tenemos la aplidina que desarrolla Pharmamar.

—¿Entonces ve posible que se encuentre esa pastilla ‘mágica’ anticovid’?

—Creo que sí. En el caso del sida se tardó diez años, pero en el 85 ya se consiguió el AZT. Desde el año 95 hay nuevos antivirales estupendos. No consiguieron erradicar el VIH, pero tomando esos compuestos ya no se mueren.

—¿Las mutaciones son un problema añadido?

—Hemos tenido suerte porque es un virus que muta poco y está respondiendo bien a las vacunas.

Katlin Karicó
«No pudo venir a mi laboratorio porque no le dieron la beca y fue a Estados Unidos»

—¿Habrá nuevas pandemias como se vaticina?

—Seguirá ocurriendo. Hemos tenido tres pandemias de coronavirus en el siglo XXI: 2002, 2012 y 2020, más el Ébola. Y eso con virus, a lo que hay que añadir bacterias y hongos. Es algo constante. Lo que ha sido fundamental e histórico es la rapidez y cantidad de investigaciones en un año sobre el coronavirus para investigar vacunas y todo lo que se conoce ahora del virus.

—¿Cómo se puede prevenir un impacto tan grande como el de esta pandemia?

—La mascarilla, el menor contacto con otras personas incluso de la familia. Es triste decirlo, pero es necesario sobre todo para personas de cierta edad y de riesgo. Yo también abogo por tomar productos naturales para estimular el sistema inmune.

—Por ejemplo...

—El astrágalo, que activa los macrófagos del pulmón y evita la diseminación de la infección. Como son productos no tóxicos no hay problema en tomarlo.

Estimular la inmunidad
«El astrágalo activa los macrófagos del pulmón y evita la diseminación de la infección»

—Es curioso escuchar a un científico recomendar productos naturales. Generalmente se desacreditan.

—Es complementar las dos cosas, la terapia clásica con los antifúngicos con productos naturales.

—La OMS acaba de concluir su investigación en China sobre el origen del coronavirus. ¿Le convence su explicación?

—Desde el principio, cuando se secuenció en el 7 de enero de 2020, fue claro que estuvo implicado el murciélago. Esto desmonta toda esa teoría de que fue creado en un laboratorio como también explico en mi libro.

—En China dicen que pudo llegar a través de congelados.

—Eso lo dicen los chinos, que usó los congelados como plataforma. Pero está claro que vino de allí aunque no lo llamemos el virus chino, cosa que sí hacemos con las variantes: británica, surafricana, brasileña...

—¿Ha afectado la pandemia a la investigación de otras enfermedades?

—Con la pandemia se han olvidado muchas cosas. Ha sido un éxito histórico pero muchos científicos que estaban estudiando otras enfermedades se han pasado a estudiar el covid y eso con el tiempo se va a notar.

tracking