Expertos de León operan los ojos a doscientos senegaleses

«Algunos pacientes ven por primera vez a sus nietos después de una operación sencilla que dura entre diez y quince minutos. Es una satisfacción muy grande». El oftalmólogo del Hospital de León, Jorge Sánchez Cañizal, inicia hoy su tercer viaje con la Fundación Elena Barraquer. En esta ocasión se dirige a Senegal, donde le esperan doscientos pacientes ya seleccionados a los que devolverá la vista después de eliminar de sus ojos las cataratas que los mantienen ciegos desde hace años. No es su primer destino de esta empresa solidaria. Ya ha estado en Mozambique y Gabón. En esta ocasión encabeza una expedición de la que forman parte las leonesas Sonia de la Fuente —que ya ha participado en otras expediciones— y Belén Saiz—es su primera salida—como personal de Enfermería. Una misión humanitaria compuesta por dos oftalmólogos y un equipo de doce personas de toda España. «Nos ponemos a operar a las ocho de la mañana, pareamos cuarenta minutos a comer, y seguimos operando hasta las once de la noche. Es un objetivo muy ambicioso», explica Jorge Sánchez, que no menciona la palabra quirófano. Los especialistas intervienen a sus pacientes en espacios adaptados por la Fundación Elena Barraquer para esta misión. En Mozambique operó a sus pacientes en una sala de un centro de salud destinada a practicar circuncisiones una vez al mes y en Gabón habilitaron una clase de una escuela.

Los oftalmólogos locales de Senegal ya tienen seleccionados a los pacientes a los que el equipo de españoles devolverán la vista. «En estos países los problemas de oftalmología son una emergencia social. No hay especialistas», explica Sánchez Cañizal. «En Mozambique, un país de 15 millones de habitantes, sólo hay seis oftalmólogos. Para que nos hagamos una idea del problema hay que compararlo con León. Sólo en el Hospital de León somos más del doble de especialistas que hay en todo Mozambique». Si los oftalmólogos de otros países no se desplazan a operar a estas zonas desfavorecidas la población está condenada a la ceguera por cataratas «una de las principales causas de ceguera evitables».

Sonia de la Fuente como personal de Enfermería. FOTOS CEDIDAS POR JORGE SÁNCHEZ

Ante la escasez de medios, el equipo se desplaza con todo el material necesario para las cirugías. «La mayoría de las personas a las que operamos están ciegas de los dos ojos, pero solo intervenimos uno. Operamos cataratas pero a veces tienen también desprendimiento de retina. Ofrecemos diagnóstico y tratamientos, pero solo operamos cataratas». Entre los dos cirujanos de esta expedición — el oftalmólogo Joaquín Fernández, patrono de la fundación Elena Barraquer, y el leonés Jorge Sánchez— operarán 450 personas. «El objetivo es realizar un millar de reconocimientos oftalmológicos y entregar 500 gafas de lectura».

Equipo del oftalmólogo leonés y miembros de la Fundación Elena Barraquer. FOTOS CEDIDAS POR JORGE SÁNCHEZ

«Se trata de un compromiso social por erradicar la primera causa de ceguera evitable en países en vías de desarrollo y así devolver la visión a personas sin recursos y recuperar su independencia y la de sus familias». Esa es la misión de la Fundación Elena Barraquer, que organiza expediciones humanitarias para acabar con la ceguera provocada por cataratas, una afección que se produce en el cristalino de manera natural y debido al envejecimiento. Las imágenes se ven nubladas se pierde agudeza visual.

En las cataratas incipientes se pueden tomar medidas paliativas como el uso de gafas de sol para evitar el deslumbramiento o graduadas si se ha producido un cambio en la refracción. «A través de la Fundación Elena Barraquer llevamos gafas de ver y de protección solar. Algunas personas llevan ciegas treinta años y es una pasada ver cómo reaccionan cuando recuperan la vista al día siguiente de la operación». La expedición aterriza el sábado en Dakar.