DIVERSIDAD
El fútbol tiene los días contados en el recreo
Somos Diversos en León quiere que os patios de los colegios de la provincia sean espacios de convivencia, de aprendizaje y de participación de todo el alumnado, incluido el de necesidades educativas especiales. El Colegio Jacinto Benavente de Gijón explica a los padres, madre y profesorado su proyecto. Entre las medidas, repartir el patio para juegos que no sea sólo fútbol
Algunos momentos de los niños y niñas en los patios de un colegio de Gijón. FACEBOOK / JACINTODIVERSO
«Los patios dinámicos en los colegios reducen a la mitad los conflictos entre el alumnado». El director del Colegio Jacinto Benavente de Gijón, Miguel Ángel Suárez Riestra explicó ayer a profesores y representantes de las asociaciones de padres y madres de León las iniciativas que ha puesto en marcha el centro para que los recreos se conviertan en espacios de convivencia. La propuesta fundamental del centro fue reducir el espacio y los días de fútbol durante el recreo. «El recreo es también un tiempo educativo. Es sabido que la mayoría del alumnado ocupa ese espacio para jugar al fútbol mientras otros, que no pueden, pululan por los lugares piramidales sin participar». La decisión de repartir el espacio no cayó bien entre los alumnos acostumbrados liderar los juegos y la estrategia fue implantar los cambios de manera progresiva. Primero se destinó un lugar a otros juegos alternativos, más cooperativos propuestos por los propios alumnos, relacionados con ejercicios que se impartían en educación física. «De un día pasamos a tres días. Hubo mucha resistencia del resto del alumnado de 5º y 6º curso. Ahora juegan al fútbol la primera semana del mes y el resto del tiempo el espacio se organiza de manera equilibrada», explica Miguel Ángel Suárez.
En los patios dinámicos hay juegos diversos para que puedan participar el alumnado con capacidades diferentes «para que nadie se sienta excluido».
La Asociación Somos Diversos de León quiere, a través de un convenio con la Dirección Provincial de Educación de León, implantar estas iniciativas en los recreos de los colegios de la provincia. Al acto acudió el presidente de la Felampa de León, Arsenio Martínez García, que se mostró partidario de la participación de los centros de León en estas iniciativas, aunque ya hay centros, como el Lope de Vega, que tiene en marcha estrategias similares. «Para poder llegar a cabo este proyecto necesitamos que se implique todo el profesorado, tiene que ser transversal y cambiar los hábitos que se siguen en los centros a la hora del recreo. Se trata también de implicar a todos los niños y niñas en todas las actividades, que nadie se quede fuera». El objetivo, para los padres y las madres de los alumnos es «aumentar las relaciones de amistad y evitar los conflictos porque en todos los centros educativos hay niños y niñas con necesidades especiales. Con los espacios dinámicos caen los conflictos».
Fuera de los juegos mayoritarios se quedan los niños y niñas con espectro autista, enfermedades raras, dislexia o parálisis cerebral. «Nos dirigimos a toda la diversidad», explica Gema Fradejas, secretaria de Somos Diversos.
La asociación quiere fomentar los espacios dinámicos, con la colaboración del claustro de profesores. «A partir de ahora esperamos que haya muchos colegios que se apunten a esta iniciativa y será la Consejería de Educación la que imparta la formación al profesorado de los centros que quieran participar».
Una de las partes importantes del proceso de implantación del proyecto es la mediación como forma de resolución de los conflictos, una dinámica que ya tienen adelantada los colegios de la provincia de León, con dinámicas implantadas en las aulas. De lo que se trata es que ahora se cumplan den los patios de forma sistemática. Los patios diversos están pensados para que formen parte de los planes de convivencia del los centros ya que los recreos son un tiempo para la socialización y las relaciones personales.
En los patios dinámicos no faltan los circuitos de juegos de chapas, juegos de mesa, puzles, libros pizarras para pintar con tizas de colores y balones que son botellas de plástico. «Esta idea se nos ocurrió durante el terremoto de Haití. Allí los niños no podían jugar con balones y como método de concienciación jugamos a un partido de fútbol mixto, con unas reglas específicas, en el que el balón era una botella de plástico».
La incorporación de estos patios necesita una evaluación por parte del profesorado.
En Gijón son ya varios centros los que han puesto en marcha esta iniciativa.