Divorcio exprés por la basura rural
La marcha de Balboa de la Mancomunidad del Bierzo Oeste desata un cruce de cartas con mensajes irónicos entre los alcaldes y el envio de un ramo de flores.
Monteserín, con sombrero, en su último pleno de la Mancomunidad.
Las disputas dialécticas y políticas por la recogida de basura entre los alcaldes de Corullón, Vega de Valcarce, Trabadelo y Barjas, por un lado, —todos pertenecientes a la Mancomunidad del Bierzo Oeste— y el regidor de Balboa, que abandonó la entidad supramunicipal para gestionar su ayuntamiento el servicio de residuos, han tomado forma con cruce de misivas de lo más irónicas y también con un regalo en forma de ramo de flores.
El pasado 25 de julio el alcalde de Balboa, el popular José Manuel Gutiérrez Monteserín, envió un escrito con membrete municipal a los cuatro alcaldes de la Mancomunidad del Bierzo Oeste indicando textualmente lo siguiente: «Estimada compañera, quiero agradecerte personalmente tu colaboración a través de la Mancomunidad de Municipios Bierzo Oeste en la recogida de basuras (mierda en lenguaje vulgar), realizada por este Ayuntamiento. Deseo que os sea de gran provecho. Atentamente», más la firma del regidor.
A esta misiva contestó la Mancomunidad con una nota esta misma semana en la que los alcaldes de Corullón, Vega, Trabadelo y Barjas le indican al regidor de Balboa que le «agradecen, tras su separación formal de la Mancomunidad, el tiempo» que ha dedicado a ella y le desean lo mejor. Le recuerdan que se fue «voluntariamente» y fue efectiva el pasado 1 de mayo. Y finalmente señalan los cuatro alcaldes aún mancomunados que le envían «un ramo de flores al Ayuntamiento de Balboa en agradecimiento a la colaboración prestada durante tantos años».
Según aseguró ayer a este periódico Alfredo de Arriba, vicepresidente de la Mancomunidad del Bierzo Oeste y a la vez alcalde de Barjas, todo tiene su origen en el hecho de que le pidieron al alcalde de Balboa que, dado que se había ido del ente y que había comprado un camión para recoger la basura, debía de pagar los contenedores de su municipio propiedad de la Mancomunidad. O bien, devolvérlos. Según Alfredo de Arriba, se entabló una negociación con Monteserín, y éste dijo que estaba dispuesto a pagar entre 25 y 30 euros por contenedor, cuando, según el vicepresidente de la Mancomunidad cuesta cada uno entorno a los 250 euros.
Hubo una posterior negociación sobre el precio, pero no llegaron a un acuerdo. Por eso, desde la Mancomunidad Bierzo Oeste le enviaron una carta al Ayuntamiento de Balboa dándole un mes de plazo para comprar o reintegrar los contenedores. «Pasaron dos meses y todo siguió igual y entonces, la Mancomunidad fue y los recogió de Balboa y ahora este señor —por Monteserín— se rebota como si fuéramos nosotros los culpables», indica Alfredo de Arriba, al tiempo que señala: «Él nos envía una carta a cada alcalde de la Mancomunidad hablando de mierda y nosotros le remitimos otra carta dándole las gracias y enviándole un ramo de flores; Este señor se quería quedar con todo y no pagar lo que tenía que pagar».