La DO Bierzo bate otro récord de ventas con más de nueve millones de botellas
Los vinos bercianos acumulan seis años de crecimiento en los mercados interior y exterior.
Uno de los actos promocionales de los vinos de la DO Bierzo en Madrid. RAQUEL P. VIECO
m. c. | ponferrada
Las heladas de la pasada primavera y la prolongada sequía posterior mermaron considerablemente la que se predisponía como una de las mejores cosechas de vino de los últimos años. Por ello, 2017 no fue tan bueno como debiera en lo que a la recolección de uva se refiere. Una circunstancia, eso sí, contrarrestada por la buena marcha de los vinos con Denominación de Origen Bierzo en el mercado. Consolidan la tendencia al alza y continúan batiendo récords. Ya son seis años consecutivos rompiendo marcas y los más de nueve millones de botellas vendidas en 2017 lo corroboran. El Consejo Regulador de la DO Bierzo dio a conocer ayer los datos de ventas del año que acaba de terminar y han sido 9.280.482 las botellas vendidas, «la cantidad más alta desde que se registran datos», destacaron fuentes del Consejo.
«La creciente aceptación de los vinos viene dada por el esfuerzo comercializador de las bodegas y la labor divulgativa del Consejo Regulador en los principales mercados del mundo», destacaron fuentes de la dirección de la DO, atribuyendo a ese trabajo el incremento de las ventas en más de 40.800 contraetiquetas con respecto al año 2016. Por ello, el ejercicio que acaba de comenzar será igualmente intenso en lo que a la promoción se refiere. No en vano, fortalecer la presencia de los vinos con Denominación de Origen Bierzo en el mercado tanto interior como exterior es uno de los pilares del trabajo del equipo directivo pilotado por Misericordia Bello. En 2018, las actividades de promoción se centrarán en la organización de diversos eventos tanto en España como en los mercados internacionales de Europa, América y Asia.
Los datos ofrecidos ayer por el Consejo Regulador de la DO Bierzo certifican que el verano es la época más proclive para el consumo de vino y julio fue el mes que registró una actividad mayor, con la venta de casi 1,3 millones de botellas de los más de nueve millones de todo el año.
Por lo tanto, las ventas han permitido cerrar el año 2017 con un buen sabor de boca, algo agriado por la caída del 32% en la cosecha por la baja pluviosidad y las heladas. Agridulce porque aunque hubo menos fruto, el que se recogió —más de nueve millones de kilogramos— fue de una «calidad excepcional», según volvieron a destacar ayer fuentes del Consejo Regulador.
