Álvarez formaliza la renuncia, pero las mujeres exigen su salida de la Caja

El pleno del Ayuntamiento de Ponferrada aceptó ayer oficialmente la renuncia de Ismael Álvarez como alcalde y concejal del PP. Aunque lejos del salón consistorial una veintena de mujeres se concentraba frente a la sede que Caja España en la plaza de Fuente Dorada, en Valladolid, para exigir su destitución inmediata como integrante del Consejo de Administración de la entidad, una vez que ha sido condenado por un delito de acoso sexual sobre la ex edil de Hacienda en el Ayuntamiento ponferradino, Nevenka Fernández. Las participantes en la movilización, convocada por la Coordinadora de Mujeres de Valladolid, se apostaron ante la sucursal bancaria tras una pancarta en la que se podía leer: «Ningún agresor en cargos públicos. Alcalde dimisión. Ninguna agresión sin respuesta». Al mismo tiempo corearon consignas en contra del todavía consejero, cargo que ostenta en representación del Grupo Parlamentario del PP. A este respecto, la portavoz de la coordinadora, Rocío Mielgo, en declaraciones recogidas por Europa Press, destacó: «Estamos aquí porque queremos decirle a Caja España, a Álvarez y al PP que ningún agresor sexual puede permanecer en un cargo público» y para denunciar el apoyo que desde la referida formación política se está brindando a un «hombre que está condenado por este delito». Mielgo censuró por ello la actitud del PP, en especial de Ana Botella, y pidió a sus dirigentes que sean «consecuentes, ya que por un lado se manifiestan en contra de la violencia de género y por otra siguen respaldando a Alvarez». La Coordinadora de Mujeres de Valladolid, que tiene previsto reunirse mañana para analizar, entre otros asuntos, la permanencia de Alvarez en el Consejo de Administración de Caja España, no descarta convocar otro tipo de movilizaciones si no se modifica esta situación.