Dos manteles y productos típicos Una devota berciana más

Noceda fue ayer el municipio encargado de realizar la tradicional ofrenda a la virgen de la Encina. En un día tan señalado para los bercianos, el alcalde de esta localidad, Emilio Arias hizo llegar a la patrona las necesidades más importantes, y sin duda alguna vitales para el municipio, con el fin de que al menos algunas puedan ser cumplidas. Ante la atenta mirada de miles de bercianos y con los escudos de cada uno de los municipios de la comarca como estampa que le acompañó en su discurso, Arias solicitó a la Virgen la mejora de las comunicaciones «y no me refiero sólo a las carreteras sino a las nuevas tecnologías de la información que acerquen a este municipio al resto del mundo. Estamos convencidos de que el turismo será un motor de desarrollo para estas zonas rurales, pero eso debe conjugarse con la máxima accesibilidad». El alcalde de Noceda también se refirió a las fuentes existentes con las que cuentan las localidades del término municipal a las que calificó de mágicas «aunque el paisaje de castaños que las caracterizaba está siendo atacado por el chancro y la tinta, algo que de no ponerle freno la ciencia y las administraciones cambiará para siempre nuestra imagen y la del resto del Bierzo». La construcción de viviendas sociales «para conseguir que con ello los jóvenes que quieran seguir viviendo con nosotros se puedan quedar», mayores y mejores servicios así como un tejido industrial «adecuado a nuestra situación» fueron otras de las peticiones del regidor para la patrona de los bercianos que ayer volvió a lucir con más intensidad que nunca y a la que no sólo en este día sino a lo largo de todo el año se le profesa un cariño especial. Arias completó su intervención pidiendo a la Virgen que «ilumine a los que tienen poder de decisión para que nos tengan en cuenta a los bercianos y que atiendan estas necesidades que creemos básicas para nuestro futuro». A continuación, la tradicional misa y la consiguiente ofrenda que fue presenciada por miles de personas en la plaza del Ayuntamiento de Ponferrada llevaron de intensidad y devoción que llegó a sus cotas más altas con la llegada de la Virgen portada en procesión por jóvenes desde la basílica. Ya en la plaza, Noceda estregó sus presentes en forma de dos manteles de lino casero para el altar de la Encina elaborado por ocho mujeres y con un cáliz, hojas de vid, racimos de uvas, flores y espigas como motivos así como un serie de productos de la zona portados por setenta personas representantes de las cuatro pedanías de Noceda. La ofrenda de Noceda a la patrona del Bierzo se tradujo este año en dos manteles de lino casero para los altares de la basílica bordados por ocho mujeres (algunas de ellas en la foto), así como productos típicos de la zona en este caso pertenecientes a las cuatro pedanías de Noceda. Todo para que sus súplicas sean escuchadas. Fátima López Placer, vicepresidenta de la Diputación para el Bierzo, acudió ayer como una devota más a la tradicional ofrenda a la virgen de la Encina. Ataviada con el traje típico y acompañada de sus familiares Fátima fue una más de los miles de bercianos que no dudaron en arropar a su patrona.