La Junta se suma a la reivindicación para impulsar la conexión ferroviaria entre el Cantábrico y el Mediterráneo

La consejera de Movilidad y Transformación Digital, María González Corral, ha participado hoy en Logroño en el Foro Impulso al Corredor Cantábrico-Mediterráneo, auspiciado por las organizaciones empresariales de Castilla y León, La Rioja, Comunidad Valenciana, Cantabria y Aragón. Una iniciativa que ha concluido con la firma de una declaración, por parte de los representantes de las asociaciones empresariales organizadoras, en la que se solicita al Gobierno de España un impulso a esta conexión.

Durante su intervención en el acto, González Corral ha expresado el apoyo incondicional de la Junta y de su presidente, Alfonso Fernández Mañueco, a esta declaración, que supondría “la unión del Corredor Atlántico con el Cantábrico-Mediterráneo en Miranda de Ebro, lo que potencia aún más si cabe la capacidad logística de nuestra Comunidad, convirtiendo a esta localidad burgalesa en un importante cruce ferroviario”.

Además, se reclama la reapertura de la línea Soria-Castejón a la mayor brevedad posible. La consejera ha lamentado que el Ministerio de Transportes anunció un estudio de viabilidad para la reapertura de esta línea, que vería la luz a principios de 2024, “pero que no se conocerá, previsiblemente, hasta el segundo semestre del año; y éste será solo el primer paso, después seguirán los proyectos, por lo que resulta muy difícil que sea una realidad en 2030”.

La consejera ha destacado la importancia de los corredores ferroviarios y, refiriéndose al Corredor Atlántico, ha recordado otros proyectos que se vienen reivindicando desde la Junta de Castilla y León, como la reapertura de la Ruta de la Plata o la línea Madrid-Burgos, “así como el resto de infraestructuras del Corredor Atlántico o complementarias a éste, que permitan un desarrollo equilibrado de todas las provincias de nuestra Comunidad”.

Reivindicación al Gobierno de España

González Corral ha recordado que es el Gobierno de España el que tiene que solicitar fondos de la Unión Europea y presupuestar recursos propios para acometer los trabajos para que el Corredor Cantábrico-Mediterráneo esté en funcionamiento antes del 2030 en los tramos comprometidos de la Red Básica. También ha lamentado que el Ejecutivo central “tendría que haber apoyado, en los foros correspondientes, la inclusión en la Red Básica (2030) o en la Ampliada (2040), los tramos incluidos en la Red Global”.

Por ello, la Junta de Castilla y León se suma a la reclamación de las organizaciones empresariales para que el Gobierno “aproveche la oportunidad histórica que suponen los fondos europeos y destine los esfuerzos y recursos técnicos y económicos necesarios para su desarrollo y sus infraestructuras conexas, por ser proyectos que contribuyen de manera decisiva a la vertebración y cohesión de todo el territorio, redundando en un mayor desarrollo económico y generación de empleo”.

La consejera de Movilidad ha destacado, además, la importancia de sumar esfuerzos para apoyar proyectos como el Corredor Cantábrico-Mediterráneo y ha recordado al respecto el frente común que en su día hicieron las comunidades de Castilla y León, Galicia y Asturias, con el que se consiguió incluir el ramal noroeste del Corredor Atlántico.

Ha reconocido el interés y el trabajo de las organizaciones empresariales con este proyecto y ha subrayado que “son los empresarios los que generan riqueza y empleo y es a las administraciones a quienes nos corresponde apoyar sin fisuras proyectos como el que hoy defendemos aquí, pues este corredor no es solo beneficioso para las comunidades que estamos hoy aquí representadas, sino que es beneficioso para toda España y para Europa”.