El modelo de financiación catalán estuvo muy presente en el debate
El debate sobre las 31 enmiendas parciales presentadas por el PSOE al Articulado del Proyecto de Ley de Presupuestos de la comunidad para el 2004, que fueron rechazadas con los votos de los populares, se convirtió ayer en un enfrentamiento sobre el modelo de financiación propuesto por el nuevo Gobierno de Cataluña, liderado por los socialistas tras el pacto con ERC e ICV, según informó Ical. El procurador del PP Carlos Fernández Carriedo sostuvo que la propuesta del PSOE catalán es «insolidaria» y su aplicación representaría una merma de los fondos que maneja la comunidad de 835 millones de euros. Al respecto, aclaró que 480 millones se reducirían de las inversiones previstas en los Presupuestos Generales del Estado, si se computase su reparto en función del PIB de cada territorio, tal y como proponen los socialistas. Además, explico que otros 355 millones se detraerían por la aplicación del modelo de financiación autonómica propuesto. «Defendemos la España de la igualdad y la solidaridad. Hay que decir no a su documento y sí a Castilla y León», enfatizó. Por su parte, el secretario regional del PSOE, Ángel Villalba, interrumpió la alocución de Carriedo para acusar a los populares de eludir debatir sobre los Presupuestos de la comunidad, y centrar la discusión en Cataluña. Al respecto, en un receso del pleno, calificó de «lamentable» la intervención de «Carriedo», que se ha «sumergido en el debate de investidura de Maragall», dijo. Además, afirmó que esto responde a una estrategia nacional del PP, «un discurso artificial que se va a agotar en pocas semanas». Al respecto, defendió que «nadie puede poner en duda la visión integradora de España de Maragall y su apuesta por la vertebración del territorio» y aseguró que el PSOE de Castilla y León «no va a permitir que la solidaridad entre regiones» se reduzca. Por otra parte, destacó que si para el PP es importante el debate sobre Cataluña, también debería serlo el de los fondos de la UE, que suponen una aportación de 1.500 millones en 2004 para Castilla y León, y con la actitud «inflexible» de España con los países que más aportan (Francia y Alemania) «se está jugando con el destino» de las partidas que recibe la comunidad. Por su parte, Carriedo preguntó a los socialistas si sus compañeros de Cataluña les han pedido permiso para firmar el pacto y calificó las propuestas las enmiendas socialistas de «ideas en catalán y traducidas al castellano».