La salida del Objetivo 1 recorta por primera vez la partida europea de los presupuestos en un 35%
Las cuentas del 2007 crecen el 6,8% a pesar del bajón de fondos de la UE
Las inversiones reales alcanzan los 1.498 millones, un 7% más que en las cuentas de este año
Los últimos presupuestos de la Junta de Castilla y León de esta legislatura, y los primeros que empezarán a sufrir el recorte de fondos procedentes de la UE, alcanzarán para el 2007 los 9.652 millones, lo que supone un incremento del 6,84% respecto a los del 2006. Así lo anunció ayer el presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, quien destacó que en absoluto se trata de unos presupuestos de transición, en alusión a las próximas elecciones autonómicas, ya que pensaba ejecutarlos él mismo hasta el final. Entre las prioridades, incidió en el gasto social, las políticas encaminadas a luchar contra la despoblación, el empleo, la dinamización de la economía, el desarrollo tecnológico y la cooperación local. En cuanto a las inversiones, los presupuestos de la Junta para el 2007 prevén alcanzar los 3.000 millones, contando las inversiones reales, que suman 1.498 millones de euros y suponen un incremento del 7,12% respecto al año pasado, y las transferencias de capital, que ascienden a 1.196 euros y experimentan un aumento del 7,71%. Pese a estos notables incrementos, que superan a los de años anteriores, las cuentas del 2007 son las primeras que experimentan un considerable recorte de los fondos procedentes de la UE, provocado por la pérdida de la condición de Objetivo 1. En concreto, Herrera cifró en un 35% el descenso de estas partidas, recorte que, si se tienen en cuenta los compromisos todavía pendientes del periodo 2000-2006, alcanzaría el 44%. Así, mientras este año los fondos procedentes de la UE, excluída la PAC sumaban 323 millones, este año tan sólo se recibirán 210 millones, de los cuales, únicamente 181 corresponden al nuevo marco financiero 2007-2013. Beneficios fiscales Por otro lado, Herrera recodó que otro capítulo por el que la Junta reducirá sus fuentes de ingresos es el de los beneficios fiscales. Sólo en el 2007, las arcas autonómicas dejarán de recibir 246,54 millones a causa de estos beneficios que, según Herrera, beneficiarán a unas 170.000 personas en total.
