Suicidio

El invento del maligno

De estas cosas se habla poco, vaya usted a saber por qué, pero el asunto es que un concursante de reality-show se ha suicidado. Ha sido en el programa Engáñame si puedes , que consiste en poner a convivir a varias parejas sin que se sepa quién es pareja de quién; gana quien acierte la identidad de cada cual. No, no ha sido en España: ha sido en Francia. El suicida se llama Jean Pierre, un concursante homosexual.

El dato de la homosexualidad no es irrelevante porque este señor -"treinta y dos años-" concursaba precisamente en condición de tal, así como otra pareja lesbiana y ocho heterosexuales. Jean-Pierre no se ha suicidado en el programa; ha sido después y por razones aún desconocidas. Para añadir dramatismo, se ha hecho público que este señor dejó colgado un mensaje en Youtube antes de poner fin a su vida. Tiempos modernos.

Esto es la primera vez que pasa en Francia, de modo que la conmoción ha sido notable. De entrada, la cadena afectada -"M6-" ha decidido no emitir el programa, cuya grabación había terminado dos meses atrás y que iba a estrenarse esta misma semana. En su lugar se ha emitido un capítulo de Bones , serie que allí también funciona bien. La noticia del suicidio de Jean-Pierre es importante porque incide en un aspecto siempre polémico: el equilibrio psicológico de los concursantes de los reality-shows o, si se prefiere, el impacto psicológico de este tipo de programas en sus concursantes.

En Francia, la M6 ha aplicado sobre el suceso una consigna: estricta discreción por respeto a la familia. Puede pensarse que en España las cosas habrían sido muy distintas y que la cadena afectada habría tratado de explotar el episodio por distintas vías: patética escenificación del dolor de la familia, investigación torticera de la vida privada de la víctima, elevación del novio del muerto a la condición de contertulio fijo, etc. Ya sé que esto es un juicio de intenciones, pero nadie dirá que es infundado. En fin: descanse en paz el pobre Jean-Pierre. Y apunten el dato los psicólogos de los reality-shows: juegan con material delicado.