Antonio Gamoneda
Una cerrada ovación que se mantuvo dos largos minutos puso el broche a la alocución de Caballero Bonald, arropado por un buen puñado de poetas, como Ana María Matute y Gamoneda.
Una cerrada ovación que se mantuvo dos largos minutos puso el broche a la alocución de Caballero Bonald, arropado por un buen puñado de poetas, como Ana María Matute y Gamoneda.