Asedio a la muralla de León
El Ayuntamiento reparará otra vez el tramo del Cid, cuya restauración según IU «fue una chapuza».
Detalle de una de las numerosas pintadas que hay en el tramo de la muralla romana que discurre por el jardín del Cid.
«Deficiencia neuronal». Es el ‘mensaje’ -a modo de certero diagnóstico- que ha estampado un grafitero en el tramo más asesiado de la muralla de León.
El Ayuntamiento tiene previsto arreglar este verano los destrozos en el lienzo del jardín del Cid. Es la tercera vez en dos años que la fortificación del siglo IV sufre ataques vandálicos. Este tramo parece maldito. Tras desplomarse en el 2008 uno de los cubos de la calle Ruiz de Salazar, la muralla fue reconstruida en el 2011 con 550.000 euros sufragados por el Gobierno. La única zona peatonal del adarve no ha durado intacta ni un año y no sólo porque los muros están llenos de pintadas, sino que el suelo de madera está destrozado, levantado y quemado y el ‘balcón’ acristalado sufre numerosas fracturas por el impacto de las pedradas.
Pese a que el alcalde anunció, cuando se realizó la última reparación, que intensificaría la vigilancia, la muralla está ahora incluso más deteriorada que en el anterior ‘asedio’. El Ayuntamiento no ha cuantificado los costes de una rehabilitación que se ha intentado abaratar con mano de obra del Centro de los Oficios.
Las reparaciones de hace un año las llevó a cabo la empresa Esoca —la misma a la que se adjudicó la rehabilitación en el 2011—, sin costes adicionales, por estar dentro del período de garantía. Izquierda Unida denunció ayer en un comunicado de prensa que, aparte de los actos vandálicos, la peatonalización de este tramo de la muralla «es una obra sin pies ni cabeza del PSOE, que ahora el PP es incapaz de gestionar, por su negativa a invertir para subsanar este sinsentido y cuidar el resto de lienzos de la muralla de León».
«La chapuza»
Según explica IU en una nota de prensa, «la elección de los materiales fue inadecuada y, por supuesto, no han resistido ni el embate de los elementos (pronto empezaron a curvarse las maderas) ni de las personas. A esa altura no cabe en cabeza humana utilizar cristales».
IU exige explicaciones al PP «por negarse a subsanar de verdad este desastre y asumir los costes continuos de reparaciones constantes», así como al PSOE y a la UPL, «por ser los cerebros de esta chapuza que se venía venir».
La concejala socialista en el Ayuntamiento de León Evelia Fernández denunció ayer que el Ayuntamiento no tiene intención de continuar la rehabilitación de la muralla ni actuaciones para favorecer su accesibilidad. El proyecto para hacer paseables otros tramos de la fortificación romana parece estancado. El Plan Director contempla hacer visitables otros tres tramos: uno entre el hospital de La Regla y Puerta Castillo; el segundo, desde el Arco de la Cárcel hasta la Era del Moro; en total, más de 600 metros. También se contempla abrir al público el tramo de Ramón y Cajal, al que se accedería desde la Casa de Espiritualidad de San Isidoro, con un recorrido de 120 metros. Igualmente, podrían ser visitables, aunque resulta más complicado técnicamente, los restos de la fortificación localizados a lo largo de la calle Conde Rebolledo, unos cien metros.