Villamañán se convierte en Villamajazz

Parecía imposible. Pero el festival que convierte Villamañán en Villamajazz cumple hoy diez años. La alianza entre aficionados, músicos, vecinos y el esfuerzo de los organizadores han conseguido que la cita con el jazz y el swing celebre una década. El grupo asturiano Padrulla Dixie abre hoy una nueva edición que este año ha fichado a trece formaciones. También esta noche actuarán los grupos leoneses From Swing to Bop y Delta Galgos y los madrileños Cromatica Pistona, swingjazz- rock con vocación festiva, y repertorio original a base de letras en varios idiomas). El festival, que se prolonga hasta el domingo, contará también con la actuación de Tri Full Jazz, buenos conocidos del público capitalino (dedicado en cuerpo y alma a rendir tributo a los standards del jazz clásico); y con la sorpresa de Las Chicas de la Danza, dirigidas por Rosario Granell (tanta, que los organizadores prefieren decir: «Sólo acudiendo al espectáculo sabréis lo que puede deparar»). Completan la oferta a orillas del Esla el concierto didáctico de Beatriz Larom —el objetivo es que los más pequeños empiecen a apreciar y degustar el jazz—; la sugerencia de Swing Ladies, que desarrolla repertorios de swing y jazz con diferentes voces femeninas y, para poner punto final al sábado, dos potentes recitales: el de Walter Coronda Trío, liderados por el guitarrista homónimo, uno de los más sobresalientes de la escena porteña, y el de Aguardiente Swing Quartet, grandiosa y divertidísima banda de voces e instrumentos de cuerda. El domingo la liturgia la oficiarán La Senda de Django, cuyo nombre lo dice todo, Rädio Lulú, audaz aleación de swing y pop, y Meniltmontant, emocionante viaje desde los años veinte hasta los cincuenta, y con toda el alma revolucionaria de los Reinhardt y Grapelli.