Dylan envía al límite el discurso que le permitirá cobrar el Nobel

álvaro soto | madrid

«La aventura de Dylan se cierra», dijo ayer la Academia Sueca después de anunciar que el cantautor estadounidense había enviado por fin el discurso que le permitirá recibir los ocho millones de coronas (819.000 euros) que le corresponden como ganador del Premio Nobel de Literatura. Una «aventura» que comenzó el 13 de octubre del año pasado y que termina, tras varios extraños capítulos, apenas cinco días antes de que concluyera el plazo que la Academia da a sus galardonados para hacer públicos sus discursos. Si esto no hubiera ocurrido antes del 10 de junio, Bob Dylan no habría cobrado el cheque. Pero el discurso llegó, y quiso Dylan que sus palabras navegaran entre las procelosas aguas de la literatura y de la música. «Nuestras canciones están vivas en la tierra de los vivos. Pero nuestras canciones no son literatura. Están ahí para ser cantadas, no leídas», proclamó.