Diario de León

León lleva 26 años en el ‘purgatorio’ de la Unesco

La espera infinita. Cinco hitos leoneses aguardan en la Lista Indicativa a ser declarados Patrimonio de la Humanidad. No hay ninguna candidatura exclusivamente leonesa, sino compartida con otras provincias, y algunas llevan 26 años en lista de espera.

Iglesia de Peñalba de Santiago. L. DE LA MATA

León

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Únicamente tres hitos leoneses están en el ‘cielo’ de la Unesco. El Camino de Santiago es Patrimonio de la Humanidad desde 1993; Las Médulas, desde 1997; y los Decreta, que suponen el reconocimiento de León como cuna del parlamentarismo, son Patrimonio Inmaterial desde 2013.

En el ‘purgatorio’ hay otros cinco. Es el inventario de aquellas propiedades que cada Estado tiene intención de conseguir que sean Patrimonio de la Humanidad. Un trámite obligatorio. En la llamada Lista Indicativa figuran la Vía de la Plata, en lista de espera desde hace 26 años; el Patrimonio Histórico Minero; Ancares-Somiedo; y la Mesta-Rutas ganaderas, todos inscritos desde 2007; y los edificios mozárabes (San Miguel de Escalada y Peñalba de Santiago), desde 2019.

Pozo María de Villablino. MARCIANO PÉREZ

España cuenta con 31 bienes en esa misma lista, donde se incluyen las candidaturas a propuesta de las comunidades autónomas, tras ser ratificadas por el Consejo de Patrimonio Histórico. En ella aparece la catedral de Jaén, mientras que la de León nunca ha tenido acceso a la Lista Indicativa.

No hay ninguna candidatura exclusivamente leonesa. La iglesia de Santiago de Peñalba, epicentro de la tebaida berciana, y el monasterio de San Miguel de Escalada llevan de séquito a San Pedro de la Nave (Zamora), San Miguel de las Viñas (Burgos), San Baudelio de Berlanga (Soria) y las vallisoletanas San Cipriano y Santa María de Wamba. Además, si se consigue el título de Patrimonio Mundial para el mozárabe, Castilla y León compartirá gloria con Galicia (San Miguel de Celanova) y Castilla-La Macha (Santa María de Melque y San Pedro de la Mata). Ancares-Somiedo abarca territorios de León, Lugo y Asturias, cuya característica común es la braña, un sistema tradicional de ganadería basado en la trashumancia.

Una construcción de los Ancares. ANA F. BARREDO

La candidatura de los senderos ganaderos de la Mesta, en lista de espera desde hace catorce años, la comparten León, Galicia y Castilla-La Mancha. Las cañadas reales creadas por la trashumancia ganadera forman parte del paisaje cultural de León. Estas cañadas, cordeles y veredas, protegidos a lo largo de los siglos por la organización ganadera de la Mesta (fundada en 1273) forman una red de 125.000 kilómetros, muchos de ellos todavía en uso. Unas 5.000 cabezas de ganado ovino y bovino realizan la trashumancia entre Extremadura y León cada año; y otras 50.000 trasiegan dos veces al año entre las riberas y páramos leoneses y la montaña. En cuanto al patrimonio histórico minero, junto a las explotaciones de Riotinto de Huelva o Rodalquilar de Almería, figuran el valle de Sabero y Villablino. Una candidatura común para explotaciones repartidas por nueve comunidades: Andalucía, Baleares, Aragón, Asturias, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Cataluña, Murcia y País Vasco. La candidatura de la Vía de la Plata explica que esta ruta comprende dos subtramos, el primero formado por la calzada romana que, desde Mérida, llegaba hasta Astorga; y el otro, constituido por el trazado que, desde el mismo punto de partida, conducía hasta la desembocadura del Guadiana en Ayamonte.

Incomprensiblemente, León ha sido excluido o, no se menciona expresamente, en otras dos candidaturas: las calzadas romanas de la Península Ibérica, a pesar de que algunas de las más importantes, como la Vía Nova (entre Astorga y Braga) o las que unían a Astorga con Zaragoza y Mérida o la de Sahagún- Lugo, discurrían por esta provincia. Igualmente, el románico del Norte ha dejado fuera a la principal joya: la colegiata de San Isidoro.

Cartel señalizador de la Vía de la Plata. CAMPOS

El caso Gaudí

En 1984 se declaró Patrimonio de la Humanidad la obra de Gaudí, incluyendo el Parque Güell, el Palacio Güell y la Casa Milà. Fueron las primeras s representantes de las vanguardias artísticas del siglo XX en conseguir este reconocimiento. En 2005 esta declaración inicial se amplió, para sumar los trabajos de la fachada de la Natividad y la cripta del Templo de la Sagrada Familia, la casa Batlló, la casa Vicens y la cripta de la colonia Güell en Santa Coloma de Cervelló, uno de sus primeros proyectos que se caracteriza por su estilo neomudéjar. La Casa Botines de León, y el Palacio Episcopal de Astorga, dos de las tres únicas obras que Gaudí realizó fuera de Cataluña, quedaron fuera.

En idéntica situación se encuentra la muralla de León, una de las tres mejores fortificaciones romanas, junto a las de Lugo y Ávila, que sí son Patrimonio de la Humanidad.

Pastor de un rebaño trashumante. RAMIRO

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