Vengadores, infieles y fenómenos

Antes de que llegue a las pantallas leonesas Plauto , la inenarrable comedia urdida por Coto Matamoros por la que desfilan algunas de las estrellas de la llamada «telebasura», como Leonardo Dantés, El Dioni o La bruja Lola, se adelanta en la competición en taquilla FBI. Frikis Buscan Incordiar ; un arriesgada apuesta de Javier Cárdenas, conocido por sus colaboraciones en las Crónicas Marcianas de Javier Sardá, que él mismo escribe, dirige, produce y protagoniza. La sordidez a la que se ha llegado en el circuito televisivo promete alcanzar sus mayores cotas en una comedia, por llamarlo de alguna manera, que al parecer se basa en gastarle pesadas bromas a los ilustres invitados que hacen encantados el ridículo con tal de mantener en alza su popularidad. Lo que ha urdido este intrépido reportero de maneras cuestionables es una mezcla de los programas Inocente, inocente y el norteamericano Jackass . Personajes que han poblado la pequeña pantalla durante los últimos meses, sometiéndose a la burla descarada que de ellos hace un periodista valorado por su olfato para descubrir talentos de lo absurdo, se dejan filmar por el objetivo de una cámara protagonizando episodios marcados por el mal gusto y la chabacanería. Huyendo de sutilezas, ha orquestado un delirio que hará estremecerse al patio de butacas mientras se contempla a Paco Porras arrastrado por una cuerda, a la pitonisa Lola acosada por serpientes, a Encarni (madre de una de las concursantes de Gran Hermano ) lanzada al vacío desde noventa metros de altura o a Juan Miguel, el famoso peluquero que estuvo casado con Karina, en plena sesión depilatoria. Un fascinante y enriquecedor universo creativo, sólo equiparable al Marte nocturno, por el que también transitan «celebridades» de la talla de Carmen de Mairena, Pozí, Josmar, Arlequín o Nacho Sierra. Si no saben quienes son, es buena señal. El que si es conocido, y por evidentes méritos propios, es John Travolta, un actor que reventó las taquillas protagonizando dos de los musicales más famosos de la historia del cine, F iebre del sábado noche y Grease , y que vive ahora una segunda etapa de estrellato desde que Quentin Tarantino le rescatara para su Pulp Fiction . En la película The Punsiher ( El castigador ) vuelve bordar un registro que le dio excelentes resultados en la eficaz Swordfish ; el malo de la película. Esta nueva adaptación de un cómic de la casa Marvel ha preferido alejarse del estilo que impregna las aventuras de coetáneos como Spiderman, Hulk o Daredevil, para presentarnos a un héroe marcado por la normalidad. La misma que desprende una cinta en la que no abundan los efectos especiales, el montaje no produce dolor de cabeza y la música no es una sucesión de ritmos electrónicos con vocación discotequera. La historia arranca con la despedida de un hombre de su trabajo en el FBI, una decisión tomada tras participar en una exitosa operación contra el narcotráfico en la que muere un hombre. Su padre, un oscuro hombre de negocios de Florida, decide entonces aniquilar a toda la familia del causante de su pena y, coincidiendo con una celebración, mata hijos, padres, sobrinos, tíos y abuelos del agente. Ya se pueden imaginar que la obsesión del protagonista, una vez recuperado del incidente, será vengar la masacre. Tom Jane, que cuando se peleaba con tiburones en Deep Blue Sea se hacía llamar Thomas, es el protagonista de un eficaz ejercicio de acción, con grandes dosis de humor para no tomarse demasiado en serio, en el que también intervienen Rebecca Romjin Stamos, la rubia de Femme Fatale , Veryl Jones, James Carpinello y Mark Collie. El guionista Jonathan Hensleigh, autor de las historias de Jumanji , Armaggedon , Jungla de cristal o La roca , debuta en la dirección con este largometraje. La presencia española aumenta esta semana con la llegada de La mirada violeta , una película producida y protagonizada por Cayetana Guillén Cuervo que aborda un tema poco frecuente en nuestro cine; la infidelidad femenina. Para ello se nos cuenta la historia de una escritora, profundamente enamorada de su marido, que no puede evitar sentirse atraída por hombres de diversas generaciones; un compañero de trabajo de su esposo, un alumno y un joven veterinario. Nacho Pérez de la Paz y Jesús Ruiz dirigen un filme en el que también intervienen Alberto Jiménez, Roberto Enríquez, Julieta Serrano y Aida Folch.