Cheryl Studer, una leyenda en León

Aunque hubo que esperar algunos meses hasta su restablecimiento, mereció la pena. La impagable voz de la soprano norteamericana Cheryl Studer llenó anoche la sala sinfónica del Auditorio con algunas de las arias que la han convertido en leyenda viva del canto y una de las sopranos más cotizadas en los grandes coliseos wagnerianos desde Bayreuth al Metropilotian, de Munich a la Scalla. En todos ellos y durante más de treinta años la Elsa por antonomosia de Lohengrin, la Elisabeth de Tanhaüsser, o la Pamina de la Flauta Mágica,   ha dejado su huella de eximia cantante y excelente actriz. Ante un público poco versado en el canto del autor de Parsifal, de Strauss o Barber y acompañada con excelencia por el pianista Johathan Adler, la soprano norteamericana bordó los Wesendonc lieder de Wagner y derrochó lirismo y hondura en Allerseelen, y Seidem dein Aug und Befreit de Strauss,donde demostró una vez más que junto con Waltraute Meier es una de las mejores liederistas del momento. Grandioso recital el ofrecido anoche.