El cielo sobre la tierra en Chano

Un escenario inigualable. En el castro de Chano, situado en el valle de Fornela, se pueden encontrar los restos de un antiguo poblado perteneciente a la cultura castreña del noroeste. Está formado por dieciséis edificaciones de forma circular y tres recreaciones de las mismas, cubiertas de paja, elevadas para explicar al visitante cómo vivían nuestros antepasados. Dentro de estas edificaciones podemos encontrar desde ayer una exposición de la artista Ana Belén Cadenas que recoge una serie de pinturas recogidas bajo el título Doce cielos y un paisaje . La muestra supone, además del regreso de la artista, la confirmación de un deseo, plasmar unas ideas largamente meditadas, «desde la certeza y las dudas, con humildad y coraje» afirma Eduardo Aguirre, columnista de Diario de León. La primera regla del pintor para plasmar en sus obras el cielo es que ha de mirar siempre hacia arriba, colocándose en el lugar oportuno en el momento preciso. La artista ha realizado un viaje al interior de sí misma para encontrarse a ella, captar la inspiración y realizar una colección de pinturas que han cumplido con creces las expectativas creadas tras su anterior muestra, en verano de 2006. Ana Belén Cadenas ha definidos sus cuadros como «ventanas» y así es. Gracias a ellas se puede mirar el mundo, el sol, la luna, los cielos, incluso al hombre, sin que éste se encuentre representado. «En los cielos de Cadenas el color es el color humano en su infinita gana de registros» argumenta sobre la exposición Eduardo Aguirre. Además, añade que la «única respuesta posible de un pintor a este tiempo de espejismos es crear su propia obra, con la épica del trabajo en silencio, ajeno a modas, orgulloso de parecer anacrónico a quienes digan qué es contemporáneo y qué no lo es. Nunca han sido más estruendosos los fuegos de artificio alrededor del arte, pero, precisamente por ello, nos urgen exposiciones como ésta, en la que nos vemos enriquecidos por aquello que contemplamos». Aunque cada cuadro se puede contemplar de manera independiente, la exposición conforma un único universo, una visión conjunta en la cual se percibe con mayor claridad la riqueza de sugerencias interpretativas de Doce cielos y un paisaje . Y es que, como dijo Hermes Trimegisto: «Tal como arriba es abajo, tal como abajo es arriba». La muestra, inaugurada en la tarde de ayer, se puede visitar todos los días de 11.00 a 13.00 horas y de 16.00 a 20.00 hasta el 8 de septiembre en el Área Temática del castro de Chano, en el valle de Fornela, un entorno que nos acerca a la historia de los habitantes de la región antes de que los romanos se instalaran en la zona para explotar sus riquezas auríferas. Después de la llegada de los romanos, el poblado se relaciona con la explotación de algunos yacimientos de oro cercanos.