El español Nico Terol impone su maestría en 125cc
Tenía muchas ganas Nico Terol de ganar una carrera en España, ante su afición. Para el piloto alcoyano, subcampeón del mundo de 125cc, era una asignatura pendiente: con seis victorias en su palmarés, y cinco podios en pistas españolas, le faltaba saborear las mieles del triunfo en casa. Y este domingo se sacó la espina.
El pupilo de Aspar es el principal favorito a ganar el último mundial del octavo de litro, pero en Jerez no valía asegurar un buen puñado de puntos para mantenerse líder de la clasificación general: «Era ganar o caer, lo he dado absolutamente todo», aseguró al bajarse de lo más alto de podio.
La carrera se planteaba complicada, sobre un asfalto mojado a medias, la peor situación para los pilotos pues hace difícil calibrar hasta qué punto resbala la pista. Pero el pilotaje fino y preciso de Terol se adapta perfectamente a estas circunstancias, así que no había motivo para la preocupación. Acaso el alemán Sandro Cortese, que tenía la pole y se mostró muy fuerte en los entrenamientos, pero el de Bocairente salió como un cohete, y en el primer paso por meta ya gozaba de una ventaja de 1 segundo y 4 décimas, para disipar cualquier duda. Héctor Faubel fue el único que quiso evitar el monólogo de su compañero Nico.