JORNADA DE LA NBA
Ricky Rubio lleva a los Timberwolves a la victoria ante los Spurs (87-89)
El jugador catalán, que ha conseguido su octavo doble-doble, ha provocado el delirio entre los aficionados de Minnesota
Ricky Rubio anima a los espectadores a animar a los Timberwolves, el viernes en el Target Center de Minneapolis.
Un espectacular Ricky Rubio ha provocado esta madrugada el delirio entre los aficionados de los Timberwolves de Minnesota que han acabado coreando el nombre del jugador de El Masnou -- "¡Rubio!, ¡Rubio!..." después de que este haya llevado a su equipo a la victoria ante los Spurs de San Antonio por 87-89. Rubio ha exhibido lo mejor en todas las facetas de su juego. Ha logrado su octavo doble-doble de la temporada y ha aportado 18 puntos y 10 asistencias. Además, ha sido clave en los momentos decisivos y ha anotado nueve tantos en el cuarto periodo que han marcado la diferencia en el resultado final del encuentro.
El catalán ha sido el jugador de los Timberwolves que más tiempo ha estado sobre la pista; 42 minutos, para anotar 7 de 12 tiros de campo, incluido un triples de dos intentos, y 3 de 4 desde la línea de personal. También ha realizado una buena labor bajo los aros al capturar cuatro rebotes y ha superado el problema de las pérdidas de balón. Rubio le ha ganado el duelo individual al base francés Tony Parker, que ha anotado dos puntos más pero ha fallado 10 de 19 tiros de campo, y se ha quedado con solo tres asistencias y tres rebotes.
Problemas superados
Los Timberwolves tenían la ventaja parcial de 73-67 con menos de nueve minutos para concluir el tiempo reglamentario, pero Parker mantuvo a los Spurs en el partido con varias canastas que dejaron a su equipo a solo un punto del empate en 120 segundos de inspiración ofensiva. Luego llegó un triple de Gary Neal para el parcial de 79-77, pero ahí surgió la genialidad y el acierto de Rubio que anotó dos tiros de personal e hizo una canasta en tiro de suspensión decisivo para asegurar a los Timberwolves (83-79) que ya no iban a perder, sino incrementar con el buen juego defensivo del equipo en el último minuto y medio del partido.
La actuación de Rubio tiene un valor doble porque se produce en el momento oportuno y después de los problemas que el catalán ha tenido en los tiros de canasta en los últimos seis partidos, con solo un 23% de acierto.