Llamazares, en la recámara

El Ademar sigue dando pasos en la confección del próximo proyecto deportivo que estrenará la temporada que viene con Dani Gordo en el banquillo. Y si en estos momentos hay un puesto que es prioritario definir es la portería; toda una incógnita actualmente.

El meta titular la pasada temporada, el navarro Iñaki Malumbres, dejó el equipo para fichar por el Atlético. Sin embargo la desaparición sorprendente del club rojiblanco le ha puesto de nuevo en la órbita del Ademar y su retorno es una de las negociaciones que tiene abiertas el club. Su compañero, el croata Matej Asanin, tiene firmada una temporada más pero ha comunicado su intención de marcharse y aceptar una oferta del Metalurg macedonio. El problema es que el club le ha respondido que pase por caja y deposite los 35.000 euros de su cláusula.

La situación con ambos está en compás de espera aunque esta misma semana podría quedar resuelta. De todas formas, en previsión de la marcha del portero balcánico el club tiene en su agenda a un veterano meta leonés, Rogelio Llamazares, que se formó en las categorías inferiores del club pero que nunca tuvo una oportunidad clara de destacar con la camiseta ademarista. Ahora, a sus 34 años de edad, las circunstancias han cambiado mucho y los ajustes a que está obligada la entidad marista le pueden traer de nuevo de regreso.

Llamazares estuvo en el equipo en la época de Torrego y Hombrados pero nunca llegó a tener un hueco. Lo vio claro y decidió marcharse para iniciar un largo periplo por clubes de la Asobal y de la división de plata que le llevó, entre otros, al Algeciras, al Octavio Pilotes, al Aranda y al Barakaldo.