Diario de León

LA RONDA CICLISTA ESPAÑOLA

La Vuelta vive un día de perros en Andorra

Varios corredores abandonan por hipotermia en una etapa que gana el italiano Ratto y en la que Nibali se hace más fuerte

Ratto, vencedor en la Collada de la Gallina, en Andorra.

Ratto, vencedor en la Collada de la Gallina, en Andorra.

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SERGI LÓPEZ-EGEA / Sant Julià de Lòria (enviado especial)
León

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Un italiano simpático, que hasta este sábado no destacaba por subir montañas, Daniele Ratto, se ha proclamado vencedor en el Coll de la Gallina, en la primera de las tres etapas pirenaicas de la Vuelta a España, en una jornada de perros, infernal, de agua, frío, niebla y todos los elementos que invitaban a cualquier cosa menos a montar en bici. Hasta cuatro ciclistas han tenido que abandonar por hipotermia; entre ellos, Ivan Basso, que peleaba por la general, y Luis León Sánchez. En total, 17 corredores se han ido a casa en un solo día (15 durante la etapa y dos que no han salido). Caras de frío en la meta, de sufrimiento, de todos... menos de Vincenzo Nibali.

Andorra ha recibido a la ronda española, en una etapa que salía de Bagà, con una tormenta de rayos y truenos que poco a poco iba cerrando el cielo conforme bajaba la niebla. Alejandro Valverde, que como buen murciano prefiere el calor al frío, se ha agarrotado bajando Envalira y se ha descolgado del grupo de favoritos, aunque subiendo y entrando ligeramente en calor, ha evitado que se le escapara la Vuelta para conservar la tercera plaza y seguir esperando un fallo, que jornada a jornada parece más difícil, de Nibali y también del veteranísimo Chris Horner. Purito Rodríguez ha peleado, con su equipo tratando de eliminar rivales, pero ha cedido unos segundos a Nibali y Horner, que han ocupado la segunda y la tercera plaza de la etapa por detrás del escapado Ratto.

Este domingo, más montaña, la etapa reina de la Vuelta 2013, con una etapa que empieza en Andorra para ascender el Cantó, la Bonaigua, entrar en el Vall d’Aran y desde allí a Francia para subir Balès, el histórico Peyresourde y acabar en la estación de esqui de Peyragudes, donde Valverde se anotó un triunfo de etapa, el año pasado en el Tour. Al menos, las previsiones metereológicas son más optimistas.

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