Casemiro: primera opción

Carlo Ancelotti aseguró ayer que el Real Madrid no fichará a nadie en el mercado de invierno para sustituir a Khedira y que su intención es recurrir al brasileño Casemiro para suplir al centrocampista alemán que deberá estar al menos seis meses de baja. Ya que el técnico italiano no es partidario de cambiar su habitual sistema (4-3-3) por un 4-2-3-1 que daría a Isco la oportunidad de ser titular como mediapunta, Casemiro, la sensación de la pretemporada, se perfila como reemplazo de Khedira en un centro del campo con Xabi Alonso y Modric.

El entrenador del Real Madrid prefiere cambiar a Khedira «por un jugador con más o menos las mismas características» antes que modificar el dibujo, ahora que parece haber encontrado el ansiado equilibrio. «Tenemos jugadores que en este momento no han jugado minutos y están en buena condición. Hablo de Casemiro. Sobre todo, de Casemiro», reconoció Ancelotti cuando se le preguntó por el posible sustituto del alemán que se rompió los ligamentos el pasado viernes. «Para jugar con Isco, habría que jugar con dos mediocentros (Xabi Alonso y otro pivote) e Isco más adelantado», justificó el técnico blanco, que insiste en que su intención es «poner un sistema en el que los jugadores estén cómodos». Ignorado tras destacar en los partidos de preparación del verano, Casemiro es por tanto ahora la primera opción que maneja Ancelotti a partir del partido del sábado contra el Almería, por delante de Isco, Illarramendi y Di María, en una medular tras el tridente formado por Bale, Benzema y Cristiano Ronaldo. «Khedira es un jugador muy importante para nosotros y necesitamos encontrar una solución. Estoy seguro de que vamos a arreglar esta ausencia», apuntó Ancelotti, que recordó que «Isco ha jugador algún partido en un centro del campo con tres, a la izquierda (contra el Levante y el Málaga)», pero que en el 4-3-3 el joven malagueño no tiene sitio.

Tras fracasar en el Camp Nou al alinear a Sergio Ramos en el medio, Ancelotti también reconoció que no piensa, como hizo José Mourinho, en alinear a Pepe como pivote destructivo.