España 99 Montenegro 60 La vigente campeona continental pasa por encima de un rival que apenas aguantó cinco minutos a una selección con todos sus jugadores en plan estelar
Una ‘ÑBA’ de dibujos animados
Ricardo MOlinelli | CLUJ
La selección española, actual campeona de Europa, sacó músculo en su debut ante Montenegro para ganar por 99-60, no permitir ningún sobresalto y dejar a todos claro cuáles son sus intenciones. Cinco minutos duraron las dudas, los nervios y la preocupación del equipo español en su debut en el Europeo 2017 ante Montenegro, los mismos que tardó en ponerse por delante en el marcador con una bandeja tras entrada franca de Fernando San Emeterio, 10-8.
Los fallos, las imprecisiones de España en las primeras posesiones del partido permitieron a Montenegro ponerse por delante en el marcador con un Tyrese Rice acaparador del balón y también de la anotación. No hizo falta mucho más que imponer la lógica del juego. En cuanto el equipo español se puso por delante, Montenegro dio un paso atrás, intentó atrincherarse y protegerse y eso fue su perdición. Ya con otra velocidad y otra confianza, a España sólo se faltaba saber si con las rotaciones su superioridad iba a ser tan clara y resultó que sí.
A los siete minutos de partido, 15-10, ya no quedaba nadie del quinteto inicial y comenzó el reinado del ‘Chacho’ con pases imposibles y con asistencias mágicas que Willy Hernangómez aprovechó como nadie.
Por parte montenegrina, algunos fogonazos, más de lucha que de clase de Nikola Vucevic y poco más. Marko Todorovic y Bojan Dubljevic estuvieron discretos y Montenegro se fue desangrando poco a poco, 26-14 al término del primer cuarto y 51-29 al descanso. El tercer cuarto careció ya de cualquier historia, el equipo español mantuvo con solvencia la ventaja e intentó trabajar para que esos minutos no fueran baldíos. Al término, 72-44, con el único pero de lo que al parecer es una pequeña torcedura de tobillo para Abrines. Los balcánicos arrojaron la toalla en los diez minutos finales y descafeinaron el intento de los españoles de seguir jugando serio, por lo que Scariolo dio recreo a los jóvenes hasta el 99-60 final.