La Deportiva cambia de cara

F. ROBERTO OTERO | PONFERRADA

Con todas las reservas, la Deportiva ha cambiado o parece haber cambiado. Al menos en casa es otra y el equipo y el público recuperan en cierto modo la confianza, a pesar de que el equipo sigue muy abajo en la clasificación. Eso sí, el 4-0 al Unión Adarve de la tarde de ayer le sirve para abandonar los puestos de descenso, en los que llevaba tres jornadas. Fue el de ayer sin ninguna duda el mejor partido del equipo blanquiazul en lo que va de Liga. Y es que en el anterior 4-0, el Rayo Majadahonda había sido mejor que la formación berciana durante los primeros 25-30 minutos. Y la semana pasada la Deportiva fue mucho mejor en el segundo tiempo, pero en la primera parte incluso pudo verse por detrás en el marcador. Ayer, aun cuando en el intermedio el electrónico mostraba el inicial 0-0, la Ponferradina ya merecía mandar. El palo evitó en los primeros instantes el gol de Salinas y Escalante, el tanto de Yuri sobre la misma línea de gol.

Ya se vio de salida que la Deportiva era otra. «El Unión Adarve es un equipo que sale muy fuerte en todos sus partidos», dijo Terrazas el viernes en el análisis previo. Pues ayer el que salió así fue el equipo local. Las bajas por lesión de Caiado y Ríos Reina las suplió el técnico con Iago Díaz y Jorge, el hombre para todo. Sólo los centros sin destino evitaron más acciones de peligro blanquiazul. Pero el equipo dominó en el centro del campo, donde la figura de Saúl Crespo crece a pasos agigantados. Además, el balón se movió con más rapidez, precisión y alegría y eso se notó. También es cierto que el rival contribuyó a que las cosas fuesen bien. Aun cuando en muchos momentos costó abrir la defensa riojinegra, la presión alta de la Ponferradina propició muchos robos en zona de peligro ante un rival que arriesgaba mucho en la salida del cuero jugada desde atrás. De hecho, el 3-0 vino en una acción de ese tipo y la falta de puntería y rapidez deportivista evitaron el aprovechamiento de otros regalos de ese tipo. En ataque, un único tiro centrado que paró el portero rumano de la SDP.

En diez minutos solventó el decano del fútbol regional el duelo. Fueron los que pasaron entre el 47 y el 57. Primero Iago Díaz aprovechó un rechace de un córner para empalmar a gol por la escuadra. Fue un tanto de bella factura, muy similar al que logró en su reaparición contra el Real Valladolid B. A partir de ahí el conjunto local desarboló a su rival, que se desordenó y las vio venir por todos lados. Yuri definió perfectamente un contraataque tras jugada de Salinas y pase de Andy. Y el brasileño robó un balón a un portero demasiado confiado de su juego de pies y le batió tras dejarlo sentado con un movimiento de cadera. Dos goles ante el Rayo y dos ayer le bastan al ariete alagoense para superar los 200 en su carrera deportiva como profesional y ser el máximo realizador del equipo.

Tras el 3-0 la Deportiva se relajó y el cuadro del Barrio del Pilar tuvo una posesión más ficticia apoyada en el ex culturalista Iván Mateo, que lo intentó en algún tiro lejano. Remató más el Unión Adarve en el segundo acto, pero con poco peligro.

Pallarés, que suplió a Yuri, estuvo a punto de lograr el cuarto en una falta de entendimiento entre el portero y un defensa. Pero fue ya casi sobre la hora Isi el que hizo el 4-0 en una acción personal. La celebración, tirando el balón contra el fondo, provocó la recriminación de parte del público. El jugador se excusó en sala de prensa y con una carta en redes sociales.

La próxima cita será en El Cerro del Espino contra el Atlético de Madrid B. Se trata de la primera de las dos visitas que habrá que realizar a esa instalación a lo largo de la Liga y el primero de los dos filiales consecutivos a los que se ha de medir el cuadro blanquiazul. El choque arrancará a las 17.00 horas del domingo.