Diario de León
El deportivista Trigueros pelea por la posesión del balón con el culturalista Eneko Capilla en un lance del partido. L. DE LA MATA/MARCIANO PÉREZ

El deportivista Trigueros pelea por la posesión del balón con el culturalista Eneko Capilla en un lance del partido. L. DE LA MATA/MARCIANO PÉREZ

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Deportiva 0 Cultural 0 El clásico del fútbol leonés concluye con un punto para cada equipo y sin apenas ocasiones para marcar en un partido caracterizado por el ambientazo en las gradas

ÁNGEL FRAGUAS | PONFERRADA

La Deportiva y la Cultural protagonizaron un derbi provincial con emoción, pero sin goles. El resultado final de 0-0 indica lo que fue el partido. Excesivo centrocampismo por parte de los dos equipos y sin apenas ocasiones para marcar. Sólo una oportunidad para el conjunto local en la primera mitad por medio de David Grande a falta de cinco minutos para el final de los primeros 45 cuando de chilena envió el balón a las manos del guardameta culturalista Jorge Palatsí.

Después, en la segunda mitad los dos equipos basaron su juego en una fuerte defensa sin concesiones a los puntas de ambos equipos. Con este bagaje se llegó a los últimos compases del partido, en los que ninguno de los dos cuadros acertó a rematar las acciones a balón parado que se dieron en ambas áreas. Final con empate a cero.

El conjunto ponferradino de Jon Pérez Bolo comenzó llevando la batuta del partido, aunque sin crear méritos en el área culturalista para alcanzar el gol. Sólo a través de saques de esquina accedieron los locales a las inmediaciones de Jorge Palatsí, zona en la que la retaguardia blanca se mostró contundente y segura, con un Vicente Romero que quiso jugar cada balón desde la defensa.

La primera mitad se caracterizo por una presión en toda la cancha de la Ponferradina, que conforme se sucedieron los minutos el juego de la Cultural lo minimizó a través de toque y control en la zona ancha, sacando el balón jugado como mejor fórmula, al acumular muchos hombres en el medio, para así desembarazarse de la presión berciana.

El centro del campo se convirtió en la zona del terreno de juego en la que los dos equipos trataron de mantener la posesión del balón. Más los de Víctor Cea, mientras que el conjunto de Bolo basó su sistema en balones por las bandas, sobre todo a través de Jorge García para llegar con marchamo de gol a la portería defendida por Palatsí. Entonces, los saques de esquina fueron la mejor y casi única versión de los de casa para acceder con peligro a los dominios del bloque de Cea.

Con un afán de juego en largo, los propietarios del terreno volvieron a fiarse de un Jorge García intensivo y batallador, que tentó el gol con un disparo demasiado alto.

La Cultural, por su parte, trató de mover rápido el balón en la medular, buscando siempre la penetración tanto de Hugo Rodríguez como de Aridane hacia adentro para tratar de sorprender a la contra el mayor dominio de los ponferradinos. Durante los primeros 45 minutos, en los últimos compases, el ritmo de juego y el dominio se igualó a partes iguales entre los dos equipos, sin claras oportunidades para marcar por parte de nadie. Así se llego al descanso del encuentro.

La segunda mitad comenzó con la lesión del culturalista Antonio Martínez, que dejó su sitio a Jorge Ortiz. Lo que no varió fue el dibujo de Víctor Cea sobre el campo, como tampoco lo hizo el cuadro berciano tras abandonar el campo por lesión Jon García en el minuto 10 del partido.

Con un conjunto berciano más dominador a lo largo del derbi provincial, se llegó al último tramo del encuentro con una Cultural mejor posicionada y con más ideas. Tres líneas escalonadas y muy juntas movieron el balón con calidad para llegar a las inmediaciones bercianas con peligro. El paso hacia adelante de los culturalistas finalmente tampoco se registró en el marcador. Al final, cerocerismo.

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