La pasividad marca la jornada en Quintana

Jornada apasionante y polémica la que se vivió ayer en Quintana de Rueda en la quinta cita de la Liga de Verano 2019 de lucha leonesa. Sobre todo en la categoría de pesados, donde a José J. Novoa le costó la tarjeta roja una nueva pasividad en cuartos de final. Asimismo su rival, David Andrés, pasó a la ronda definitiva ya que Cristian y Moro fueron eliminados por no darse caídas en su combate. En la otra semifinal, Abel Cabero derrotó a Álvaro Quiñones quien aún así duerme como líder. Caberín sería quien se llevó el corro final. En total, en pesados participaron 15 luchadores.

En ligeros el que sigue intratable es Víctor Llamazares. El líder de la categoría se deshizo del juvenil Fernando Rodríguez en la primera semifinal. En la segunda, Adrián Fierro hizo lo propio venciendo a su compañero de equipo Guillermo González. En cuanto al tercer y cuarto puesto, poco pudo hacer Fer frente a Guillermo. Ya en la final, Llamazares se adjudicó su quinto corro —de cinco posibles— ante un combativo Adrián Fierro.

En medio participaron un total de doce luchadores. Samuel Sánchez y Diego Arce protagonizaron un corro poco movido en la primera semifinal. Un motivo que les costó la amarilla por pasividad. La balanza se decantó en favor de Samuel en el tiempo extra por media caída. Por el otro lado del cuadro, Moisés Vega hizo fácil lo difícil derrotando a Adrián García. Vega resolvería sin dudar en la final ante su primo Samuel, lo que le distancia aún más en la general.

En semipesados —ocho luchadores— Guillermo González derrotó a Omar Liquete aunque acumuló dos pasividades mientras que Tomás no pudo con Rodrigo en uno de los combates clásicos de este peso. Ya en la ronda final, Guillermo tuvo el combate empatado pero finalmente perdió ante Rodri.

La próxima jornada de la Liga de Verano se disputará en Gradefes el próximo sábado y la sigueinte el domingo 28 de julio en Valdefresno.