Talento en el paddock con sello leonés

Corría el año 2003 y una todavía niña Ángela Benavente miraba con ojos emocionados algo que iba a marcar los años venideros. Aquel día Dani Pedrosa se coronaba campeón del mundo de 125cc. La carrera resultó espectacular y a este leonesa que desde pequeña, como no podía ser de otra manera al tener el fiel reflejo en su casa de dos apasionados del motociclismo como sus progenitores, el mundo de las dos ruedas le fue calando en la sangre , la llevó a decidirse por un escenario al que por corazón y afición le puede llevar nada menos a lo que para ella es un sueño, ser parte del paddock del Mundial de motociclismo.

Con 25 años tiene las ideas claras. Y prueba de ello es su presencia en el Máster de todo un referente en este deporte, la Academia Monlau de la que han salido grandes pilotos y también mecánicos. Esta segunda es su faceta como ya han probado otros leoneses que desde hace unos años se están ganando un nombre en los circuitos, Santiago del Canto o Antonio Multo.

Para Ángela esta experiencia, que iniciaba en febrero está resultando todo un acierto. Y también para el equipo que Gass Racing Team que pronto comprobó que de sus manos y conocimiento podían aprovecharse sus pilotos para poner a punto la monto. Ingeniera mecánica, y con el sello Monlau, Ángela es consciente que todavía tiene mucho camino por recorrer. Pero las puertas ya se le han abierto en un mundo en el que quiere ser igual que los hombres. Prueba de ello es que el equipo incluso le ofreció una habitación en un hotel para no compartir motorhome con los hombres y esta lo declinó. «Soy igual que mis compañeros», precisa. Un buen comienzo para ella y la clara demostración que para ser bueno en algo no hay que mirar al sexo, más bien a la calidad y trabajo. Y Ángela lo está realizando de manera importante en Barcelona.

La leonesa lleva en la Academia Monlau desde febrero. DL

«No he podido elegir mejor que Monlau. Cada día para mí es una jornada excelente de aprendizaje, de pasar de la teoría a la práctica y de estar en contacto con el mundo de la competición». Precisamente para esta leonesa la pista es su mejor hábitat. «En la academia aprendes y te formas para en un futuro poder estar en la pista o en la fábrica. Y yo prefiero la pista, no cabe duda».

Esa preferencia y su capacidad para trabajar la moto y alcanzar la máxima fiabilidad la ha llevado al equipo Gass Racing Team que disputa el Campeonato de España de Superbikes (ESBK). Lo hace además por partida doble con la montura de Moto4 con Máximo Martínez como piloto y con la Yamaha R3 en SBK Júnior con Juanan Conesa. Sabe que debe ir paso a paso, pero también que tiene los mejores maestros para lograrlo en una factoría como la de Monlau y una academia en la que Dani Amatriain es el coordinador. Sin olvidarse también que algunos de los mecánicos del Mundial son los encargados de impartir el temario.

«Las motos son algo que llevo en la sangre y dedicándome a la parte mecánica disfruto al máximo», precisa Ángela que ya está metida en plena vorágine competitiva en el Nacional de ESBK y que espera tanto en Superbikes como en el Mundial de Velocidad poder alcanzar una meta para la que lleva trabajando duro desde hace tiempo. Por muy joven que sea. «Los dos escenarios serían maravillosos aunque no lo voy a negar, el Mundial de Motociclismo sería lo máximo».

Mientras, con su familia motociclista en Barcelona y con la de sangre en León, disfruta de las motos en primera persona.

Algún día, lleva el camino correcto, los leoneses podrán verla en el paddock del Mundial con alguno de los pilotos a los que con la puesta a punto de sus motos y su capacidad para sacar lo máximo de les ayudará a ser campeones.