A dos años de las bodas de oro

El 48.º aniversario de la fundación de la Peña Real Madrid Cultural Leonesa tuvo en la cena de confraternidad su punto culminante. Manuel Sanchís, el que fuera el gran capitán de la entidad merengue hasta la pasada temporada, fue el personaje homenajeado en esta ocasión. Prevista para las 22.15 horas, el inicio sufrió un retraso de casi una hora su comienzo, facilitando así que todos sus asociados pudieran presenciar en el Antonio Amilivia o por televisión el encuentro entre la Cultural y el Getafe correspondiente a la segunda jornada de la liguilla de ascenso a Segunda División A del grupo C. Alrededor de 500 personas compartieron mesa y mantel con el que fuera su ídolo durante 18 temporadas. En un ambiente distendido, aunque algo apesadumbrado por la derrota culturalista, fue discurriendo la cena de confraternidad, llegando a los postres su momento culminante. Tras partir Manuel Sanchís la tarta alegórica diseñada al efecto para conmemorar la novena Copa de Europa alcanzada por el Real Madrid el pasado mes de mayo, Joaquín Fidalgo, presidente de la Peña, se dirigió a los asistentes agradeciéndoles su presencia, glosando la carrera de Manuel Sanchís, a la que catalogó de ejemplar, además de animar a Antonio García de Celis, presidente de la Cultural y Deportiva Leonesa, haciéndole ver que la derrota sufrida ante el Getafe fue un accidente y de que el ascenso es posible todavía, para entregar a renglón seguido a Manuel Sanchís una catedral de León de plata enmarcada. Un Guzmán guerrero Tras la alocución del presidente de la Peña tomó la palabra Enrique Gil, concejal delegado de Deportes en representación del Ayuntamiento de León, quien se manifestó madridista, aunque algo menos que el alcalde, tildando a Sanchís de «gran guerrero», motivo por el que le entregaba una reproducción de Guzmán distinta a la habitual, al ser esta una réplica del Guzmán guerrero, desconocido para el gran público leonés y que había aparecido recientemente en la Diputación. Antonio García de Celis fue el siguiente en tomar la palabra, agradeciendo a la Peña la cortesía de la invitación, a la vez de sentir una sana envidia por la capacidad de convocatoria de la entidad madridista, esperando que la Cultural sea capaz de conseguir algo parecido, y que el primer paso para lograrlo sea conseguir el ascenso a Segunda División A a pesar del varapalo que supuso la derrota cosechada ante el Getafe. Manuel Sanchís fue el último en tomar la palabra. Tras disculparse por no haber podido comparecer el año pasado, y agradecer a Joaquín Fidalgo y a los componentes de la Peña la comprensión por su ausencia y que se le hubiera dado una segunda oportunidad, festejó la consecución de la novena Copa de Europa por el Real Madrid, expresando su contrariedad por la derrota sufrida por la Cultural, entendiendo que León merece un equipo en Segunda División A, que el club leonés todavía puede lograr el ascenso porque mientras hay vida hay esperanza. Tras su breve alocución Manuel Sanchís procedió a entregar a Joaquín Fidalgo una fotografía enmarcada recogiendo la séptima Copa de Europa, el momento más culminante de su larga y laureada carrera deportiva, para que este luzca en el Café Bar Astoria, domicilio social de la Peña Real Madrid Cultural Leonesa, por ser una fotografía que viene a resumir el momento de alegría de toda la familia madridista al poner fin a una sequía de más de 30 años sin conquistar el galardón europeo más alto y por el que llevaba peleando el club merengue las últimas temporadas sin conseguir alcanzarlo. Finalizadas las alocuciones previstas la Peña recibió los regalos y presentes de los representantes de un gran número de peñas de toda la geografía española que se habían desplazado a León para conmemorar el 48.º aniversario de su fundación, para después amenizar la velada el dúo Capicúa antes de pasar al baile que cerraba la misma. Durante este tiempo y como colofón, Manuel Sanchís procedió a la firma de autógrafos sin perder nunca la sonrisa, a pesar de la gran cantidad que tuvo que firmar, así como a fotografiarse con cuanto aficionado se lo requirió a lo largo de la velada.