La ineficacia deriva en agonía

En la primera mitad salió dominando la Cultural, que parecía ser el equipo que quería controlar el encuentro, en lugar de su rival. Los veinticinco minutos iniciales fueron un «baño» culturalista, moviendo muy bien el esférico y triangulando casi hasta bailar al rival, un Ávila que necesitaba marcar para dar la vuelta a la eliminatoria pero que no tenía ocasiones porque no tenía el balón. El primer aviso del Real Ávila llegó a los 21 minutos de juego, en una interesante penetración de Butra que la zaga culturalista pudo despejar a saque de esquina antes de que creara mayores complicaciones a Bruno. A partir de esa oportunidad de los encarnados, el encuentro se igualó un tanto, con un reparto más equitativo en la posesión de balón y en las aproximaciones a las áreas. Llegó entonces el único remate bien dirigido entre los tres palos de todo el primer periodo. Fran lo intentó para los de León, pero su tiro salió flojo y el arquero abulense no tuvo problemas para atajar el esférico. El mayor susto para la Cultural en el primer periodo se produjo cerca de la media hora de juego, cuando en un saque de esquina fallaron defensa y portero leoneses y el balón llegó hasta el segundo poste, donde el pichichi Edu remató contra el lateral de la red. La última ocasión del primer tiempo fue una falta directa que botó Lozano para el Ávila desde muy lejos, unos 40 metros, perdiéndose el esférico muy cerca de la cruceta izquierda del portal de Bruno. Así finalizó una primera mitad de mejor fútbol culturalista, pero sin excesiva profundidad. Un gol hubiera significado casi el telón a la eliminatoria, pero el equipo no se lanzó hacia la portería del Ávila con excesiva convicción, si bien demostró una total superioridad técnica y estratégica. La segunda mitad comenzó con idénticas caracterísiticas de juego, un mejor juego culturalista ante el entusiasmo local. Por ello, en el tercer minuto, César Villafañe hizo al fin justicia cuando logró superar por alto al meta abulense con un disparo con el exterior del pie desde la frontal del área, todo un golazo que distanciaba a los de Álvarez Tomé en la eliminatoria. Ya con la Cultural en inferioridad tras la absurda expulsión de Ivo, Lozano puso el miedo en el cuerpo ya que empató con un tiro lejano a saque de falta, que desvió un zaguero leonés y despistó al meta Bruno. A renglón seguido llegó la segunda cartulina amarilla para Marco, y entonces la eliminatoria ya adquirió tintes heroicos para unos y otros. Los leoneses se encerraron en su parcela, y un disparo de Roberto fue desviado con apuros por el meta Bruno, yendo a parar el balón contra el poste de la Cultural. Tremendo cambio el que había sufrido el encuentro en pocos minutos.