Becerro, a un suspiro del podio

José Julián Becerro no pudo aderezar con una medalla su sobresaliente puesta en escena en el Mundial de Piragüismo en la modalidad de maratón. El palista bañezano se quedaba a las puertas de la medalla, a dos peldaños, tras completar los 30 kilómetros de prueba entre los mejores junto a su compañero de fatigas, Miguel Fernández Castañón.

Leonés y asturiano, que hace dos años finalizaban en el quinto peldaño del podio en el Mundial de China, repetían en esta ocasión, aunque en este caso en la localidad rumana de Biskov. Y también siendo protagonistas. Hasta el punto de que sus opciones de podio estuvieron intactas durante casi 29 de los 30 kilómetros. Incluso la presea dorada.

La prueba reina de la cita mundalista se presentaba como una ocasión inmejorable para Becerro. Y así lo dejó patente junto a su compañero Castañón. En una salida explosiva los favoritos, entre los que se encontraba la pareja bañezana-asturiana, cobraron pronto renta en la cabeza de carrera conformándose un grupo de siete embarcaciones (tres francesas, dos españolas, una sudafricana y una argentina). Con ocho vueltas por un circuito que iba a conformar los casi 30 kilómetros de examen para todos ellos, las primeras iban a marcar la distancia entre los llamados a luchar por las medallas y el resto de participantes. Con José Julián y Castañón llevando a veces el peso de la carrera y en otras los grandes favoritos, los franceses Urban y Candy, al paso por el ecuador de la prueba los primeros en ceder iban a ser los argentinos. Posteriormente los sudafricanos quedándose en las dos últimas vueltas cinco embarcaciones, entre ellas las dos españoles de Becerro-Castañón y Plaza-Llorens. Por sensaciones el palista bañezano y su compañero contaban con argumentos a favor hasta que a falta de un par de kilómetros los a la postre vencedores, los galos Urban y Candy rompían el grupo para irse por el triunfo. Por detrás Plaza y Llorens cedían casi tres segundos para ocupar la cuarta plaza de la clasificación mientras que a 17 lo hacían Becerro y Castañón con una meritoria quinta. Que incluso si no hubiera sudo por el tramo final podría haber sido mejor.