Diario de León

Balonmano | Copa del Rey

La derrota menos amarga del Ademar León

BM Nava 27 Abanca Ademar 23. El conjunto leonés cae en Nava pero hace bueno el resultado de la ida y estará en la fase final de la Copa del Rey el próximo mes en Antequera

El capitán del Ademar, Jaime Fernández, fue uno de los jugadores más activos durante el encuentro de vuelta de la tercera ronda de Copa del Rey frente al BM Nava. MARIANO GONZÁLEZ

El capitán del Ademar, Jaime Fernández, fue uno de los jugadores más activos durante el encuentro de vuelta de la tercera ronda de Copa del Rey frente al BM Nava. MARIANO GONZÁLEZ

León

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Sin duda, la de ayer fue la derrota oficial menos amarga de la temporada para el Abanca Ademar , que caía 27-23 frente al BM Nava en la vuelta de la tercera ronda de la Copa del Rey, pero que aún así estará en la fase final del torneo -se disputa en Antequera del 25 al 27 de marzo- gracias a la renta de nueve goles conseguidos hace una semana en el Palacio de Deportes (32-23).

Y aunque es verdad que volvieron a aparecer los fantasmas de las pérdidas tontas y la defensa excesivamente endeble -en algunas fases más que en otras- lo cierto es que el conjunto que entrena Manolo Cadenas quiso mantener la línea positiva de los dos últimos duelos, con actitud, agresividad atrás y compromiso colectivo. De hecho se marcharon al descanso 12-12 y llegaron a mandar de dos tras el paso por vestuarios, pero la baja de Gonzalo Pérez y los minutos que el técnico de Valdevimbre quiso dar a jugadores menos habituales, acabaron decantando la balanza en favor de un Nava que de nuevo se encomendó a Rodrigo Pérez para marcar diferencias.

Pero más allá del resultado y sobre todo haberse metido en la fase final copera, lo realmente importante para el Ademar es que mantiene viva la esperanza europea de cara a la próxima temporada. Y es que si alcanza la final de Copa, como ya hizo el pasado curso, tendrá plaza segura en la siguiente edición de la Liga Europea de Balonmano, siempre y cuando, eso sí, el Barcelona sea su rival. Para eso queda mucho sí, pero era una necesidad llegar hasta Antequera dada la pésima Liga que están realizando los de Manolo Cadenas.

De momento jugarán los cuartos de final. El reto será evitar al Barça en los cruces, porque si no la gesta se antojará prácticamente imposible. Eso dependerá única y exclusiva de los caprichosos bombos cuando tenga lugar el sorteo. El año pasado lograron evitarles y además realizaron un torneo inmaculado. Esa es la esperanza ahora.

En lo que al partido de ayer se refiere, con los dos conjuntos sabedores de que la eliminatoria ya estaba decidida a favor del Ademar, el encuentro en su primera parte se movió entre los intentos del Viveros Herol Nava de liderar el marcador y las bajas pulsaciones que le quiso meter al juego el conjunto de Manolo Cadenas, con Papantonopoulos muy acertado en el marco.

Los locales amagaron con marcharse en el marcador aprovechando una inferioridad del Ademar, tras un gol marcado por Paco Bernabéu que supuso el 11-8, pero el equipo leonés reaccionó con una gran defensa para endosar a Nava un parcial de 1-4 que puso el partido en tablas con la llegada del descanso. La segunda parte no hizo cambiar la decoración al partido, con los dos conjuntos muy intensos en el apartado defensivo. A quince minutos para el final del choque el Ademar ya se sabía ganador y bajó su rendimiento ofensivo ante un Balonmano Nava que por lo menos quería dedicar una victoria a sus aficionados.

Y lo consiguió el conjunto segoviano, que siguió trabajando en defensa con mucho criterio, consiguiendo su mayor ventaja en el partido con el 27-23 que logró Carlos Villagrán a medio minuto de la conclusión. El Nava se llevó el premio de la victoria, pero no llegó a complicarle el pase a la Final a 8 de la Copa a un Ademar que no quiso sorpresas. Aparcada la Copa, el Abanca Ademar se centrará desde hoy mismo en su trascendental partido de este sábado en León frente al BM Sinfín, donde esperan sumar el triunfo.

Después de hacer los deberes en la pista del Antequera, ahora toca refrendar la reacción de la entidad ademarista ante otro rival directo por evitar el descenso como es Sinfín. Cierto que ayer el equipo leonés volvió a mostrarse débil en defensa y cometió bastantes errores en ataque, pero lo visto en este arranque de competición oficial ha mostrado que la plantilla estaba mucho más concentrada y comprometida que durante la primera parte de la temporada. El sábado tienen otra oportunidad de reivindicarse.

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