Balonmano
La Diputación ahoga al Ademar
El órgano provincial aún no ha convocado la subvención para la 2024-2025 a pesar de que se comprometieron a agilizarla para evitar agrandar la deuda con el club

La Diputación sigue sin hacer efectivos los pagos al Ademar de las dos anteriores temporadas.
La deuda pendiente de la Diputación con el Ademar crece cada temporada desde hace tres años sin que nadie, ni su presidente ni la responsable del área de Deportes, den explicaciones o hagan efectivo su compromiso. El último, tal y como señaló Patricia Martínez a este periódico a finales de 2024, era el de agilizar los trámites para que la subvención correspondiente a la presente temporada estuviese a disposición de los clubes cuanto antes y así poder contar con ese dinero en este ejercicio. Un modo de actuar que sí tienen tanto Ayuntamiento como Junta de Castilla y León precisamente para no ahogar a las entidades deportivas.
Nadie dentro del conjunto presidido por Cayetano Franco entiende el motivo real del «constante» incumplimiento con los pagos por parte del órgano provincial. Insisten en que «todo son buenas palabras», pero, a la hora de la verdad, «nada». Según el máximo dirigente ademarista, les deben en torno a 220.000 euros correspondientes a la 2022-23, 2023-24 y la 2024-25. Desgranado, serían 60.000 euros de hace dos años, 80.000 del curso pasado y otros 80.000 —en este caso la cantidad exacta se desconoce— del presente.
¿Y cuál es el problema? Esa es la pregunta sin respuesta oficial que nadie aclara ni en el Ademar, ni mucho menos en la Diputación. Unos culpan a los técnicos y la burocracia, otros a la propia «dejadez» de la institución que salpica no solo al cuadro marista sino a otros clubes —y a otros sectores que nada tienen que ver con el deporte—. «Nos exigen que presentemos un papel, cuando está nos piden otro y así sin fin», subrayan fuentes del Ademar.
Ya el pasado año, la junta directiva del equipo leonés se vio obligada a convocar una asamblea extraordinaria en la que informaron a sus socios que o bien se rascaban el bolsillo a mayores del abono anual —algo que descartaron— o, como se terminó por hacer, pedirían un crédito a Abanca, su principal patrocinador, para cuadrar las cuentas. «Lo hemos hecho para seguir compitiendo en la élite del balonmano español, aunque conviene recordar que hay que pagar los intereses», dijo ya en su momento Cayetano Franco.
También el curso pasado hubo una reunión entre varios dirigentes de clubes —entre ellos de Ademar, Cultural y SD Ponferradina— donde estudiaron tomar medidas serias contra la Diputación. Todos se sentían perjudicados. Sin embargo, la sangre no llegó al río. Nadie quería una guerra con ellos y sí algún tipo de reacción.
Nadie pide explicaciones
El Ademar cuenta esta campaña con un presupuesto de 1,2 millones de euros. En ese montante ya han incluido la subvención pendiente de la Diputación, para la que todavía no hay bases. Tampoco otros grupos políticos piden explicaciones. No al menos de forma pública.
Al margen de esos 220.000 euros, el Ademar le reclama el pago del patrocinio de Turisleón. Un compromiso adquirido con el anterior presidente de la Diputación, que la actual niega que se plasmara «como Dios manda» sobre papel. «No hay un contrato». Tano Franco afirma lo contrario y ya ha enseñado pruebas. Lo único que han cobrado en estos tres años es la subvención correspondiente a la Copa Asobal.