Marbury «roba» en San Antonio, y Nowitzki y Pierce triunfan

Un triple «milagroso» de Stephon Marbury y las exhibiciones encestadores del alemán Dirk Nowitzki y Paul Pierce fueron el centro de atención de la jornada inaugural de la primera ronda de la fase final del campeonato de la NBA. La jornada, que comenzó sin ningún tipo de sobresalto con los Nets de New Jersey y el base Jason Kidd que ganaban fácil 109-96 a los Bucks de Milwaukee, tuvo el primero cuando Paul Pierce anotaba todo en los últimos minutos del tiempo reglamentario y los Celtics de Boston derrotaron 103-100 a los Pacers de Indiana. Pero la emoción que se vivió en el Conseco Fieldhouse no iba a ser nada con la que protagonizaron los Suns de Phoenix y los Spurs de San Antonio en el SBC Center de la ciudad del Alamo. Los Spurs, que estuvieron en control del marcador, no pudieron despegarse en los momentos decisivos y fallaron demasiados tiros de personal, incluidos cinco por el alero Tim Duncan, para permitir que Marbury con un triple, que definió como «lágrima de Dios», hizo el milagro de darle en la prórroga a los Suns la victoria por 96-95. Antes había sido el alero novato Amare Stoudemire, quien consiguió otro en los últimos segundos del tiempo reglamentario para forzar la prórroga, y al final conseguir el cuarto triunfo que han tenido esta temporada los Suns frente a los Spurs, el equipo con la mejor marca de la liga, pero perdieron la ventaja de campo. Marbury, que lideró el ataque de los Suns con 26 puntos, se apoderó del rebote del tiro de personal que había fallado Duncan y corrió para superar a varios defensas de los Spurs antes de elevarse y lanzar el balón para que pegase en el cristal del tablero y penetrase limpio en el aro ante el euforia de sus compañeros. El alero Shawn Marion y Stoudemire contribuyeron con 24 puntos cada uno para los Suns. En Dallas, Nowitzki logró 46 puntos, la mejor marca de su carrera en un partido de «playoff» y en la historia del equipo, y los Mavericks derrotaron 96-86 a los Trail Blazers de Portland.