La asociación deportiva del León Golf demanda al club

La Asociación Deportiva León Club de Golf El Cueto presentó el pasado viernes 6 de febrero una demanda contra Prosacyr Ocio, empresa propietaria de la entidad, por incumplimiento del contrato establecido en su día, según el cual, una comisión mixta, formada por dos personas de la empresa y dos de la agrupación, debía ser el órgano ejecutivo que asumiera la toma de las decisiones del tipo del establecimiento de los precios tope, las normas de uso del campo o el derecho a la información del estado del club. José Luis Díaz Villarig, presidente de la Asociación, Agustín Rajoy, secretario y Ángel Villa, tesorero, explicaron ayer, en rueda de prensa, que el contrato establecido se cumplió en una parte, pero no en otros apartados: «El mantenimiento de los vestuarios ha sido penoso hasta que se ha concedido al club la organización del Peugeot Tour, y no queda más remedio que cambiarlos, las condiciones de la cafetería son muy pobres, no tenemos una sala para reunirnos, el campo de prácticas es para todo el mundo menos para el socio, que además, es el último al que se le dan las clases siempre, en beneficio de nuevos grupos, y eso ya, por no hablar de la actitud prepotente del gerente». La asociación deportiva se reunirá en asamblea el próximo día 25 de febrero «pero antes necesitábamos emprender medidas para explicarles a los 400 socios del club que a los jugadores no se nos tiene en cuenta, que pagamos el 90% del presupuesto del año con las cuotas, y que si este señor me anula a mí» explicó Villarig «en realidad está anulando a un colectivo, no a una persona, aunque ya lo ha hecho otras veces en otros de los múltiples clubes en los que ha estado y en los que nunca ha durado mucho tiempo. Tenemos la sensación de que es una persona a la que la empresa manda para realizar un cometido muy concreto, y sólo por eso , sin darnos explicaciones, despidió a Manuel Pérez, un profesor profesional, o a la administrativa Sonia López Barrioluengo, después de un caso flagrante de acoso laboral». La representación de la asociación deportiva destacó que, en el apartado inmobiliario no tiene nada que decir «ni queremos entrar en absoluto, porque a nosotros, lo que nos interesa es la parte deportiva, y nada más, pero si se nos niegan los listados de socios, por ejemplo, pues... La empresa ha explicado su versión por escrito, pero a mí, de palabra, el primer día, se me dijo que era presidente de la nada, porque en realidad, era como si no fuese nada. De hecho, no lo somos, porque no se nos ha permitido reunirnos ni enviar cartas a los socios».