El cuerpo técnico sondea el mercado

La llegada de refuerzos al equipo es cuestión de tiempo y debería ser cuestión de muy poco tiempo porque después de la marcha de Fernando Daniel Screpis se hace necesaria la llegada de un centrocampista que se una a Ribadulla para suplir cualquier contingencia que puedan sufrir Miguel o Úriz. Se está buscando entre los equipos de Primera División con filiales en categoría inferior. No en vano, debe recordarse que el manchego Miguel García llegó del Zaragoza B y se ha convertido en uno de los mejores elementos de la plantilla, cuando pocos le conocían. Se puede contratar a cualquier jugador con independencia de la edad porque Screpis, pese a tener menos de 23 años, ocupaba una ficha senior en la plantilla. Lo lógico es que se trate de un jugador joven si se busca en un filial, pero no hay nada decidido al respecto y son muchos los frentes abiertos. Con ser esa la prioridad en estos momentos, el cuerpo técnico también está analizando la situación de los delanteros que entran dentro de las posibilidades económicas del club. Ya se hace reiterativo incidir en los problemas que tiene el equipo a la hora de hacer goles y se quiere buscar una solución en el mercado invernal. Es una necesidad imperiosa, no ya de cara a la Liga, en la que se está en segunda posición y casi se podría haber acabado el año en la primera del grupo, pero la Deportiva tiene puestas sus miras en cotas más ambiciosas y eso pasa por reunir una escuadra competitiva para la fase de ascenso. El propio Tomé ya dejaba entrever el domingo que los objetivos son ambiciosos. Se le preguntaba si la Deportiva flojea cuando se enfrenta a retos importantes como el del domingo pasado y él replicaba: «el partido de hoy era importante, pero el momento importante de este equipo está por llegar y ahí es donde no podemos fallar».