La dura cuesta de enero marcará el plan del Madrid en Liga y Copa

El mes de enero va a marcar el devenir de la Liga. Ya lo hizo el año pasado, cuando el Barcelona renació de sus cenizas a mediados del primer mes del año con una victoria en el Sánchez Pizjuán. Entonces, el solitario gol de Kluivert dio la victoria a los culés e inició una magnífica racha que aupó al club barcelonés hasta la segunda posición de la Liga. Ahora, el Madrid, deberá recortar una distancia de trece puntos. Y lo intentará en una maratón de partidos que comienza con los seis minutos ante la Real, que se disputarán el miércoles. Desde ese encuentro, Wanderley Luxemburgo tendrá que asumir un debate que se produce en la entidad blanca con excesiva frecuencia: si se tira o no la Copa. La temporada pasada, su antecesor Carlos Queiroz decidió jugar con los galácticos las rondas de ida y vuelta del torneo copero, salvo el encuentro en Eibar, donde la cantera blanca fue superada por los armeros . A partir de ese momento, el luso optó por usar en todos los partidos a sus estrellas hasta fundirlos. Ahora, el brasileño deberá plantearse si rotará a los Raúl, Ronaldo y compañía para solventar la eliminatoria ante el Valladolid, un conjunto que, después de unos inicios titubeantes, ha cogido la senda de los triunfos y se ha situado a un punto de los puestos de ascenso. Si los merengues superan a los blanquivioletas (el 12 en Zorrilla y el 19 en el Bernabéu) tendrían que disputar otra eliminatoria (26 de enero y 2 de febrero), además de los partidos de Liga. En el campeonato casero, el Real Madrid tendrá a favor que jugará tres de los próximos cinco partidos en casa. Sin contar la efímera visita de la Real, Zaragoza, Mallorca y Espanyol acudirán al coliseo de la Castellana. Fuera, el Madrid se medirá a Atlético, dentro de una semana, y al Numancia. Dos salidas nada fáciles. Además, el partido en el Calderón será la primera prueba de fuego para Luxemburgo. Precisamente para afrontar los compromisos frente a donostiarras y colchoneros, el entrenador carioca, acompañado por sus ayudantes Marco Teixeira y Antonio Melo, dirigió este domingo el primer entrenamiento del año. Durante la sesión los jugadores conocieron el plan para esta semana, que contempla sesiones de mañana y tarde. Una mini pretemporada Los jugadores del Real Madrid regresaron a los entrenamientos tras el día libre de Año Nuevo, y comenzaron una mini pretemporada diseñada por el técnico brasileño Wanderlei Luxemburgo y sus ayudantes Marco Teixeira y Antonio Melo, que debutaron en el cargo. Luxemburgo persentó a la plantilla a los nuevos miembros del cuerpo técnico y dió a conocer un nuevo plan de trabajo que servirá para tratar de encarar en buenas condiciones los cinco partidos de Liga y los dos, tres en caso de derrotar al Valladolid, de Copa que jugará el club blanco en el mes de enero. En el ensayo, el brasileño dividió la plantilla en varios grupos de trabajo, entrenándose los tres porteros (Casillas, César y Diego) aparte. El resto de la plantilla realizó ejercicios de trabajo cardiovascular, de resistencia y de potenciación, y finalizó la sesión en el gimnasio de la Ciudad del Fútbol de Las Rozas. La anécdota la protagonizó el inglés David Beckham, que se ejercitó en solitario porque llegó tarde al entrenamiento. Sólo faltaron a la cita su compatriota Jonathan Woodgate, que prosigue con su recuperación, y el argentino Santiago Solari, que tenía permiso del club. Para la jornada de hoy, los jugadores del Real Madrid se entrenarán de nuevo, pero esta vez en doble sesión de mañana y tarde para acomodarse lo antes posible al trabajo cotidiano.