Un Ademar lleno de incógnitas se juega el pase a la final de la Recopa

Las complicaciones son siempre la mejor forma de probar de qué «pasta» están hechas las personas. Sumido en un bache que se inició con la dolorosa derrota en casa frente al Valladolid y se prolongó cuatro días después con un inesperado empate frente al Teka Cantabria, un Balonmano Ademar lleno de incógnitas sobre su juego tiene esta tarde ante el Izvidac Ljubuski bosnio una buena piedra de toque para verificar si la crisis es un recuerdo del pasado o si por el contrario se hunden aún más en el socavón. Y es que, para complicar aún más las cosas, a la baja de Colón por una lesión en su tobillo izquierdo se une ahora la del lateral noruego Stian Vatne, que en el entrenamiento del jueves se fracturó un hueso de la muñeca. Así, con dudas sobre sí mismos y con un plantel mermado por dos bajas importantes, el Ademar se juega hoy en el Palacio de Deportes su pase a la final de la Recopa de Europa ante un rival bosnio que llega a León crecido tras conocer la marcha titubeante del equipo. Un partido -tal vez el más importante de la temporada- que a la postre puede ser decisivo en el resultado final de esta campaña. Y todo el mundo lo sabe. El presidente ademarista, Juan Arias, confesaba ayer tener buenas vibraciones respecto a este choque. «Son buenas en el sentido de que yo veo al equipo sabedor de que es una cita importante y de que se van a entregar a fondo. Espero que eso sea suficiente para que el equipo esté fino y pueda lograr una diferencia importante de cara al partido de vuelta». Arias espera que el equipo tenga un buen inicio que impida que los jugadores actúen con nerviosismo. «Lo importante es que el equipo coja confianza y que salgan bien las cosas en un partido clave como es este. Sin embargo, lo que también es cierto es que lo que se ha visto en todas las temporadas es que nosotros tenemos que jugar siempre al cien por cien porque en el momento en que bajamos el pistón se pueden tener los pinchazos que hemos tenido en los últimos tiempos», subrayó. El presidente es consciente de que al margen de que los jugadores se «enchufen» al partido desde el primer minuto, el aliento que reciban desde la grada debe ser el de las grandes citas. Por eso, hizo un llamamiento a la afición para que acudan hoy a apoyar masivamente al equipo, tal vez en su momento más delicado de la temporada. «No crero que el bajón retraiga a los aficionados, pero sí es cierto que a lo largo de estos últimos años no se valora la competición europea tanto como la nacional y salvo las finales con mucho renombre es cierto que hemos tenido partidos muy importantes que no se ha llenado el pabellón como en un derbi o como contra el Barcelona o Ciudad Real. Creo que esta situación tiene que cambiar y la gente debe pensar que nos jugamos mucho y que precisamos el apoyo de todos». Por lo que respecta al rival de hoy, los bosnios utilizan la defensa 5-1 y la típica balcáncia 3-2-1. Es un equipo joven donde destacan espcialmente sus dos laterales: el zurdo Mirsad Terzic que es un magnífico lanzador y Denis Buntic. Buntic, lateral derecho, es internacional por la selección croata y fue el hombre encargado de sustituir a Petar Metlicic cuando el jugador marista se lesionó en una rodilla en el partido contra España en el Mundial. «La Recopa es una competición distinta a la Asobal, y las ilusiones se van renovando por lo que ahora estamos ante un gran oportunidad de hacer algo grande y debemos poner todo el empeño, sacrificio y concentración para conseguirlo», dijo ayer el técnico Manolo Cadenas que espera conseguir hoy una buena ventaja para la vuelta. Krivochlykov Por otra parte, Juan Arias, señaló ayer que la firma para la renovación del ruso Krivochlykov, con el que ya hay un acuerdo en el tiempo -dos años-y en lo económico está en un impasse. «Faltan sólo unos flecos relativos al entendimiento entre las dos partes, pero se tratará y yo creo que es posible solucionarlo cuando nos sentemos de nuevo». Cancha: Palacio de Deportes. Hora: 18.00.