Kimi Raikkonen, a quien no le funcionó la radio desde el inicio de la carrera, dominó a placer el Gran Premio de Australia y se adjudicó la primera victoria del Mundial 2007, por delante de Fernando Alonso y su compañero en McLaren, Lewis Hamilton. Raikkonen salió desde la 'pole' y cedió el mando de la prueba solamente durante cinco vueltas, al coincidir con los repostajes. En su debut en Ferrari el finlandés consiguió varios récords y sienta así las bases de lo que promete ser una temporada emocionante. El Mundial comienza con el dominio de Raikkonen, pero con McLaren por delante de Ferrari, gracias a la segunda y tercera posición de sus pilotos. Raikkonen batió a su ex equipo, y esa una satisfacción añadida para el piloto nórdico, aunque en McLaren las caras eran también de satisfacción, no sólo por tener sus dos coches en el podio, sino porque la apuesta le ha salido redonda a Ron Dennis, con Hamilton brillante durante todo el fin de semana. El Ferrari fue sin embargo inalcanzable para Alonso y Hamilton, que trazaron su estrategia en función del dominio de Raikkonen. Al finlandés también le favoreció la suerte, ya que en los incidentes de carrera no hubo necesidad de sacar el coche de seguridad y ello le permitió mantener el liderato sin agobios. Fernando Alonso tuvo que conformarse con la segunda plaza, pero estaba muy contento con el resultado, ya que reconoció que
. No lo estaba menos su compañero Hamilton, que en su primera carrera en Fórmula 1 conseguía subir al podio. El alemán Nick Heidfeld dio también a BMW una bocanada de aire fresco, confirmándose como uno de los equipos que van a dar guerra, si bien partieron con menos gasolina y la fiabilidad aún no está del todo conseguida, con los problemas de cambio que dejaron fuera a Robert Kubica. Giancarlo Fisichella (Renault) estuvo en su línea, sin poder rodar nunca delante, pero llevó el coche hasta la meta sin problemas, todo lo contrario que Kovalainen, que fue una de las decepciones del fin de semana. Felipe Massa (Ferrari), sin embargo, hizo una de las carreras de su vida, aunque no pudo al final con Fisichella. Después de salir desde el fondo de la parrilla, el brasileño ya hizo bastante al llegar sexto. Nico Rosberg (Williams-Toyota) también se situó por delante de Ralf Schumacher (Toyota) y de Jarno Trulli, que se quedó fuera de los puntos.
Mala salida Alonso tenía acostumbrados a los aficionados a hacer las mejores y más espectaculares salidas del Mundial de los últimos tiempos. Sin embargo, el día que debutaba en carrera con McLaren, en la primera fila de la parrilla junto a Raikkonen, no ocurrió lo mismo. «Al llegar a la primera curva vi que Heidfeld venía desde el exterior, así que me concentré más en él que en tomar la curva. Me di cuenta un poco más tarde de que era cuarto y desde esa posición no podía presionar. Unas veces estaba cerca de mis rivales y otras dejaba espacio para no calentar mi monoplaza». Hamilton, en cambio, hizo una maniobra de experto a pesar de su juventud, ya que salió por detrás de Kubica y antes de llegar a final de recta se fue a la izquierda y superó al polaco, y de paso a Alonso. El británico de McLaren se colocó así tercero tras Heidfeld. Raikkonen rodaba cómodamente desde el primer puesto seguido por Heidfeld y los dos McLaren y comenzó a alejarse de sus rivales marcando una tras otra las vueltas rápidas en carrera. Alonso pronto se colocó tercero, pero el ovetense no quería conformarse con una tercera posición. Su única opción era el segundo repostaje y lo aprovechó cuando entraron Raikkonen y Hamilton. Se coló en el segundo puesto pero su diferencia conRaikkonen era casi insalvable, casi 16 segundos. La bandera a cuadros cayó como estaba previsto sobre Raikkonen, que cruzó la meta siete segundos antes que Alonso, seguido a más de 18 por Hamilton.
