Moreira se apresta para defender su título nacional

Llevaba casi año y medio sin disputar un combate oficial, pero no decepcionó a la numerosa parroquia que le apoyó en todo momento en el pabellón San Esteban. En el cuarto asalto dejó fuera de combate al retador de su título transcontinental, el brasileño Idiosan Matos. El día siguiente ya es mucho más relajado. Sauna por la mañana, comida familiar a mediodía y largo paseo por la tarde con su perro, un bull terrier. «Es feo pero simpático. El perro tiene que salir todos los días y así quemamos los dos un poco de adrenalina», manifestó Moreira. El púgil leonés espera ahora que el paréntesis entre pelea y pelea no sea tan largo como el anterior. «Si hay otro paréntesis como el que ha habido directamente me retiro, me dedico a trabajar y punto. No me como más la cabeza», afirma contundente. Por fortuna parece que no tendrá mucho tiempo para «comerse» la cabeza. Si no hay cambios, el día 18 de este mismo mes tendría otra pelea en Pamplona para seguir rodando y en septiembre hacer en Valencia una nueva defensa de su título de campeón de España en la categoría de superligeros. El único problema es que en el combate del sábado sufrió una lesión en un dedo de su mano derecha y hasta que hoy no se le hagan las pruebas oportunas para descartar una lesión seria no sabrá seguro si puede estar listo para la velada del día 18. Por otra parte, su preparador Alfredo Arrojo destacó el nivel de la velada del viernes pero criticó lo sucedido en el combate entre el leonés Vicente Burrul y un púgil madrileño. El leonés perdió por k.o. y sus incondicionales no lo aceptaron, llegando a perseguir a su rival. «La velada estuvo bien menos eso. Ell boxeo es deporte ante todo, los profesionales dan todo lo que tienen dar encima del ring y ahí se acaba todo. Esto es un deporte», subrayó.