Más comisiones, pero menos dinero
Bancos y cajas elevan las cantidades que cobran por los servicios a sus clientes, y desde julio dejarán de pagar remuneraciones elevadas por los ahorros
La recesión y el estallido de la burbuja inmobiliaria han complicado extraordinariamente el negocio de los bancos y las cajas de ahorro que tienen en España el principal núcleo de actividad, y los usuarios -”empresas y familias-” lo sufren directamente. Llevan casi dos años con un muy limitado acceso al crédito. Notan que la prestación de servicios se está encareciendo por momentos. Y en un par de semanas les será mucho más difícil sacar un buen partido de los ahorros, cuando entre en vigor la penalización impuesta por el Banco de España a la alta remuneración de los depósitos.
Las comisiones suben casi de tapadillo. Mientras se publicita con grandes carteles la prestación de servicios gratuitos, un pequeño letrero en el tablón de anuncios de las sucursales, o una nota remitida con la comunicación de los movimientos mensuales -”en el mejor de los casos-” informa de que la cuota anual por tarjeta de crédito ya tiene un importe superior, o de que determinado plan contratado para operar en condiciones ventajosas deja de estar en vigor desde el mes siguiente. Solo los clientes que una entidad considera muy -˜vinculados-™ pueden disfrutar de los servicios básicos gratuitos (mantenimiento de cuenta, abono de recibos, transferencias, una tarjeta de débito y crédito). En tiempos de bonanza, bancos y cajas se mostraban más generosos. Hoy están limitando esos favores. En general, unos piden la domiciliación de la nómina, otros la contratación de un plan de pensiones, y hay algunos, como el grupo Santander, que hacen extensiva la ventaja de su campaña -˜comisiones cero-™ a los propietarios de un mínimo de acciones. Ahora se anuncia que Bankia, el banco de siete cajas de ahorro, dará este mismo trato a los compradores de 1.000 títulos en su salida a Bolsa.
El Banco de España -“en cuya página web se pueden consultar las comisiones que aplica cada una de las entidades- aporta datos mensuales de comisiones mínimas, medias y máximas que permiten comprobar el encarecimiento de los servicios bancarios.
Si los clientes fieles pueden verse favorecidos, al conjunto de los usuarios no le ocurre lo mismo. El mantenimiento de una cuenta corriente había subido en mayo un 6,8% como media respecto al mismo mes del 2010; los descubiertos se cobran ahora al 4,11% sobre el importe total -”frente al 3,94% de un año antes-” y el porcentaje de comisión por transferencias nacionales ha pasado del 0,31% al 0,34%, siempre en valores medios.
Por la crisis, donde más se han volcado las subidas es en las tarjetas de cargo inmediato o a fin de mes.