La Bolsa española baja el 1,37 % y pierde el nivel de 8.200 puntos

La Bolsa española bajó hoy el 0,84 por ciento y perdió el nivel de 8.200 puntos, perjudicada por la caída de los grandes valores y la debilidad económica indicada por los datos del PIB en varios países -España, Reino Unido y Estados Unidos-.

Así, el principal índice de la Bolsa española, el IBEX 35, bajó 113,60 puntos, el 1,37 por ciento, hasta 8.185,80 puntos. Después de cuatro semanas a la baja, el parqué nacional avanzó esta semana el 0,54 por ciento. Las pérdidas acumuladas este año crecen hasta el 16,98 por ciento.

En Europa, con el euro a 1,436 dólares, bajaron las principales plazas: el índice Euro Stoxx 50, el 1,18 por ciento; París, el 1,01 por ciento; Milán, el 0,97 por ciento; Fráncfort, el 0,84 por ciento, y Londres, el 0,02 por ciento.

La bajada del 1,5 por ciento de Wall Street en la sesión anterior, la dimisión del primer ministro japonés, Naoto Kan, y las pequeñas pérdidas de los mercados europeos condicionaban la indefinición de la apertura del mercado nacional.

Confirmada la calificación de la deuda alemana -"AAA"- y conocido el crecimiento del 0,2 por ciento del PIB español en el segundo trimestre -0,7 por ciento interanual-, las mismas cifras que publicaba el Reino Unido, la bolsa entró en pérdidas y empezó a recoger beneficios.

Tras la posterior recuperación y nueva incursión en terreno negativo, la bolsa se mantuvo bajo el nivel de 8.300 puntos mientras Italia vendía deuda a corto y medio plazo por importe de 10.500 millones.

Pasada la mitad de la sesión acentuaba sus pérdidas y el mercado nacional bajaba de 8.200 puntos. Esta situación coincidía con el retroceso del precio del petróleo Brent, que bajaría hasta 109 dólares, y del euro, que se acercaba a 1,43 dólares.

Poco antes de la apertura de Wall Street, la Bolsa española perdía el nivel de 8.100 puntos por el dato revisado del PIB del segundo trimestre estadounidense, que creció 1 por ciento, tres décimas menos que el cálculo anterior, aunque los datos de consumo mejoraron.

Pese a esta estadística, el mercado neoyorquino abría con pequeñas ganancias que se evaporaban y se elevaban rápidamente hasta el 1 por ciento mientras aguardaba a la intervención del presidente de la Reserva Federal -banco central estadounidense-, Ben Bernanke.

Al tiempo que se conocía la leve bajada de la confianza de los consumidores estadounidense, Bernanke decepcionaba a la bolsa al señalar que se necesita tiempo para sanear la economía estadounidense, que tiene problemas persistentes, aunque dijera que dispone de herramientas para promover la recuperación.

Al posponer hasta finales de septiembre su posible aplicación, Wall Street bajaba cerca del 2 por ciento tras perder el nivel de 11.000 puntos y el mercado nacional llegaba a caer el 3 por ciento y se aproximaba a 8.000 puntos.

Sin embargo, el cambio de tendencia del mercado neoyorquino y el regreso a las ganancias -al cierre nacional subía cerca del 0,5 por ciento con el petróleo por encima de 111 dólares-, la Bolsa española y las europeas reducían considerablemente sus pérdidas, pero no podían imitar a Wall Street por la caída de las principales compañías.

Todos los grandes valores bajaron: BBVA, el 1,65 por ciento; Iberdrola, el 1,62 por ciento; Banco Santander, el 1,48 por ciento; Telefónica, el 1,32 por ciento, y Repsol, el 0,76 por ciento.

En cuanto al resultado semanal de estas compañías, subieron Repsol, el 2,16 por ciento; Iberdrola, el 1,11 por ciento, y Telefónica, el 1,03 por ciento, mientras que bajaron Banco Santander, el 1,3 por ciento, y BBVA, el 1,19 por ciento.

Entre las empresas del IBEX 35 destacó la caída del 5,31 por ciento de Mapfre, mientras que Endesa bajó el 2,4 por ciento; FCC, el 2,34 por ciento; Caixabank, el 2,21 por ciento, y ArcelorMittal y Acerinox, algo más del 2 por ciento.

Tres compañías del IBEX concluyeron con ganancias: Amadeus, con un alza del 0,57 por ciento; Gamesa, que subió el 0,26 por ciento, y Banco Popular, el 0,14 por ciento. Respecto al resultado semanal de las empresas del IBEX 35, con una compañía menos provisionalmente, subieron veintidós y bajaron doce.

La mayor subida correspondió a Amadeus, el 10,24 por ciento, animada por los datos turísticos españoles, en tanto que OHL avanzó el 4,87 por ciento y Abengoa, con nuevos contratos, el 3,44 por ciento.

IAG lideró las pérdidas con una caída del 3,59 por ciento, seguida de Mediaset, que bajó el 3,57 por ciento, y de Acerinox, que cedió el 3,51 por ciento.

En el mercado continuo destacó nuevamente la caída de las cuotas participativas de la Caja de Ahorros del Mediterráneo, el 22,94 por ciento, después de que se suspendiera su amortización, mientras que el Grupo Tavex lideró las subidas con un repunte del 4,69 por ciento.

Antes del cierre del mercado de deuda, la rentabilidad de las obligaciones a diez años española se situaba en el 4,98 por ciento, mientras que la prima de riesgo subía a 284 puntos básicos.

El efectivo negociado se situó en 1.670 millones de euros, de los que 175 fueron intermediados por inversores institucionales.