Diario de León

La debilidad del mercado interno atenaza al sector de la automoción

Las plantas españolas recibirán entre 1.500 y 2.000 millones de euros en inversiones.

Imagen de archivo de trabajadores de General Motors en Figueruelas, Zaragoza.

Imagen de archivo de trabajadores de General Motors en Figueruelas, Zaragoza.

Publicado por
Jorge Murcia | (colpisa) madrid

Creado:

Actualizado:

Con grandes dosis de buen hacer, flexibilidad en el proceso productivo, y no pocos sacrificios en cuanto a las condiciones laborales. Así está aguantando la industria española de la automoción la peor crisis económica que se recuerda en muchas décadas.

El automóvil español es el motor de la industria española, junto al turismo y las exportaciones. Según datos de la Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac), en los últimos dieciséis meses se invirtieron en las fábricas españolas aproximadamente 3.000 millones de euros. Y de aquí a final de año se espera la llegada de entre 1.500 y 2.000 millones más. Los planes industriales, como el aprobado por Renault a finales del pasado año, o el que a comienzos de éste contribuyó a evitar el cierre de la factoría de Nissan en Barcelona, permitieron asegurar el futuro a corto-medio plazo de muchas factorías a través de la adjudicación de nuevos modelos.

No obstante, la industria del automóvil español presenta también una serie de lagunas que debilitan su posición frente a las de otros países. Por ejemplo, los costes logísticos, que constituye uno de los pilares del Plan 3 Millones, diseñado por la patronal de los fabricantes para recuperar la producción de vehículos hasta esa cifra. «Es uno de los aspectos a mejorar. Uno de los fabricantes que ha decidido invertir en España desveló que había tomado la decisión por una diferencia de 400 euros en el coste de producción. Hoy en día, el déficit de logística del sector en España es de 300 euros por coches», recuerda David Barrientos, director de comunicación de Anfac.

Pese a la amplia experiencia y el buen hacer de las fábricas españolas, y ante la ausencia de firmas propias —con la excepción de Seat—, en opinión de Yolanda Morín, secretaria de automoción de la Federación de Industria de CCOO, «el hecho de no disponer de ninguna marca automovilística nos impide tener influencia, mayor información y capacidad de interlocución directa con las direcciones de las empresas en los procesos de deslocalización-relocalización que se producen»

Tanto patronal como sindicatos coinciden también en la conveniencia de reactivar la demanda interna. «El mercado interno está deprimido, y a las multinacionales también les gusta que los países en los que se instalan tengan un mercado potente», sostiene Manuel García Salgado, secretario federal de MCA-UGT y responsable de automoción del sindicato. Las sucesivas ediciones del Plan PIVE están sosteniendo las cifras de ventas en España, 699.000 unidades en 2012.

tracking