ECONOMÍA
Las hipotecas se abaratarán otra vez con la nueva bajada del euríbor en enero
Los préstamos se beneficiarán con un ahorro medio de cincuenta euros anuales
El euríbor a un año —el indicador que más se utiliza en España para calcular la cuota de las hipotecas— cerrará este mes de enero a punto de concluir en torno al -0,188 %, lo que volverá a abaratar los préstamos con un ahorro medio de unos 50 euros anuales.
A falta de únicamente tres días para que acabe el mes y de que el Banco de España confirme finalmente el dato en los próximos días, enero será el vigésimo cuarto mes consecutivo con el euríbor en negativo, desde que en febrero de 2016 cerró por primera vez por debajo de cero.
En las sesiones hábiles que ha tenido el mes, el euríbor ha oscilado entre el máximo del -0,186 %, del pasado martes día 2, y el mínimo del -0,192 % que registró el miércoles 24.
Hace un año, en enero de 2016, el indicador se situó en el -0,095 %, con lo que con una hipoteca de 100.000 euros contratada entonces a un plazo de 25 años con un diferencial de un punto porcentual sobre el euríbor tendría un coste mensual de 372,59 euros. Sin embargo, si una hipoteca con estas condiciones se revisa utilizando el dato actual, el coste será de 368,42 euros mensuales, por lo que quienes tengan que revisar las cuotas de sus hipotecas ahorrarán de media 4,17 euros al mes, unos 50 euros al año. La evolución del indicador depende de las subidas o bajadas de tipos que aprueba el Banco Central Europeo (BCE), que lleva desde marzo de 2016 sin moverlos del mínimo histórico del 0 %.
El presidente del BCE, Mario Draghi, dijo esta semana, tras la primera reunión de 2018, que «ve muy pocas posibilidades de que los tipos de interés puedan subir este año» y que solo los subirá una vez que termine el programa de la compra de deuda. Del mensaje del presidente del BCE, Mario Draghi, el pasado jueves se desprende que el camino emprendido por los bonos es irreversible. Ante la fuerte apreciación del euro, se esperaba que Draghi diera un paso atrás respecto a la mayor agresividad marcada por las actas de la última reunión de 2017. Pero no lo hizo.