Alerta coleccionistas: la peseta que Franco mandó retirar podría costar más de 7.500 euros
Se dice que el diseño, o bien el grosor del busto en el anverso, no fue del agrado del entorno del Generalísimo

En el mundo de la numismática, no todas las monedas que se retiraron valen lo mismo. Un ejemplar de una peseta acuñada en 1946 se ha convertido en una pieza de coleccionista tan rara y codiciada que su valor en subasta puede superar los 7.500 euros. Es la famosa "Peseta Benlliure", la primera en llevar el busto del General Francisco Franco, y una moneda cuya vida fue fugaz y polémica.
La moneda debe su nombre al prestigioso escultor valenciano Mariano Benlliure, quien diseñó el primer busto del Jefe del Estado para ser grabado en el circulante español.
Nació en 1946 y fue la primera moneda de la dictadura en incluir la efigie de Franco, siguiendo el patrón de la "Peseta Rubia" (aleación de cobre y estaño).
Tras la acuñación de una tirada inicial, la moneda no terminó de circular en masa, dando pie a la leyenda que explica su escasez: a Franco no le gustó el retrato. Se dice que el diseño, o bien el grosor del busto en el anverso, no fue del agrado del entorno del Generalísimo, o que presentaba problemas técnicos. En consecuencia, se ordenó su retirada y se procedió a modificar el diseño para las emisiones sucesivas, encargadas al grabador Manuel Martín.
La clave que dispara el valor de esta pieza reside en un pequeño detalle numismático: el año dentro de la estrella de seis puntas, visible en el reverso.
Se estima que la variante con la estrella 19-48 (que indica el año real de acuñación) es la más escasa, con menos de 150 ejemplares conocidos. Esto la convierte en la joya de la corona del coleccionismo franquista, alcanzando cifras récord en subastas recientes, llegando a superar los 7.500 euros si se encuentra en un estado de conservación excelente (Sin Circular - SC).
Aunque la "Peseta Benlliure" original (la de 1946 con la estrella 19-48) tuvo una vida circulatoria casi inexistente debido a su retirada inmediata, las pesetas que la sucedieron con el nuevo diseño de Franco (a partir de la de 1947) fueron la moneda de curso legal en España durante décadas.
El fin definitivo de la peseta como moneda de curso legal se produjo el 28 de febrero de 2002, dos meses después del inicio oficial de la circulación del euro.
Posteriormente, el Banco de España mantuvo abierto un larguísimo plazo de canje para cambiar pesetas por euros, un periodo que finalizó irrevocablemente el 30 de junio de 2021.
"Pasada la fecha límite de 2021, cualquier peseta perdió su valor monetario. Ahora, el único valor que conserva, y en el caso de la Benlliure, es exclusivamente su valor numismático como pieza de colección y testimonio histórico."
Si ha encontrado una peseta antigua en un cajón, revísela con lupa: la pequeña estrella de 19-48 podría ser su billete a un gran tesoro.